La policía federal estadounidense, el FBI, ha abierto una investigación tras el derrumbe de un puente en marzo en Baltimore, en el este del país, después de que un buque portacontenedores chocara contra él, informan este lunes medios estadounidenses. El accidente dejó seis muertos.
En un correo electrónico enviado a la AFP, el FBI indicó que se encontraba “a bordo del carguero Dali” para llevar a cabo “operaciones de la policía judicial”. No da detalles ni confirma la apertura de una investigación señalada por el Washington Post.
Fuentes anónimas citadas por varios medios estadounidenses señalan que al amanecer de este lunes tres lanchas arribaron a babor del Dali y agentes subieron a bordo del navío, que todavía sigue atrapado bajo un amasijo de acero.
A finales de marzo, este portacontenedores de 300 metros chocó contra el puente Francis Scott Key de Baltimore, provocando su colapso.
Los socorristas recuperaron los cadáveres de dos obreros de la construcción que reparaban la calzada del puente cuando se produjo el derrumbe. Otros cuatro siguen desaparecidos y han sido dados por muertos.
Según el Washington Post, esta “investigación penal” está encaminada a determinar si la tripulación ha soltado amarras sabiendo que el barco sufría graves problemas mecánicos, según dos funcionarios estadounidenses que han pedido el anonimato.
El “Dali”, con bandera de Singapur, había zarpado del puerto de Baltimore rumbo a Colombo, en Sri Lanka.
Tras informar a las autoridades de una pérdida de potencia debida a problemas de propulsión, el buque chocó contra el puente.
Al parecer, el buque experimentó problemas eléctricos antes de zarpar del puerto, dijo una persona al tanto de lo sucedido que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizada a hacer comentarios. Señaló que las alarmas se dispararon en los contenedores refrigerados del barco mientras aún estaba atracado en Baltimore, lo que probablemente indicaba un suministro de energía inconsistente.
La tripulación estaba al tanto de los problemas e indicaron que se atenderían, según la persona.
Funcionarios de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB) han dicho que su investigación incluirá una indagación sobre si el barco experimentó problemas de energía antes de comenzar su viaje.
La presidenta de la NTSB, Jennifer Homendy, dijo la semana pasada que los investigadores se centraban en el sistema eléctrico del enorme buque mercante que se salió de su rumbo. El barco sufrió problemas eléctricos unos momentos antes del siniestro, como indican videos en que se ve cómo sus luces se apagan y vuelven a encenderse.
Homendy dijo que la información obtenida del sistema de grabación de datos del barco era relativamente básica, “de modo que la información en la sala de máquinas nos ayudará enormemente”.
Por su parte, el alcalde Brandon Scott emitió un comunicado el lunes anunciando una asociación con dos despachos de abogados para “iniciar acciones legales para responsabilizar a los malhechores” y mitigar el daño a la gente de Baltimore.
“La ciudad de Baltimore emprenderá acción decisiva para responsabilizar a todas las entidades responsables por la tragedia, incluidos el propietario, armador, gerente u operador y el fabricante del Dali, como asimismo cualquier otra tercera parte potencialmente responsable”, añadió el alcalde.
Durante una visita a Baltimore a principios de abril, el presidente estadounidense Joe Biden prometió “mover cielo y tierra” para reconstruir el puente.
El barco sigue en el lugar, bajo los escombros del puente, bloqueando parte del transporte marítimo en uno de los puertos más transitados del país.
Se ha abierto un carril marítimo provisional para permitir el paso de los barcos que participan en las operaciones de rescate y desescombro.
(Con información de AFP, EFE y AP)