El mercado inmobiliario en Estados Unidos sigue enfrentando desafíos significativos, donde los requerimientos económicos para adquirir una vivienda se han disparado notablemente en los últimos años, revela un estudio de Zillow, un portal inmobiliario estadounidense que ofrece información sobre la compra, venta y alquiler de propiedades, así como datos del mercado y valoraciones de viviendas.
Según este informe, para el año 2024, un ingreso familiar anual de más de USD 106,000 es necesario para poder afrontar la compra de una casa de modo confortable en el país. Esta cifra sobrepasa ampliamente el ingreso medio de los hogares estadounidenses, que se estima en unos USD 81,000 anuales, según la misma fuente.
Los análisis realizados muestran que esta situación representa un incremento del 80% con respecto a las cifras reportadas en 2020. En aquel momento, un ingreso familiar de USD 59,000 era suficiente para abordar los costos relacionados con la adquisición de una vivienda. Adicionalmente, se destacó que el pago mensual de la hipoteca también experimentó un aumento significativo, elevándose en un 96,4% hasta alcanzar los USD 2,188, bajo la premisa de contar con un pago inicial del 10%.
En este contexto, el estudio agrega que parte de la problemática radica en la disparidad entre el crecimiento salarial y el incremento de los precios de las viviendas, factores agravados por la reducida oferta inmobiliaria actual en el mercado. Además, se señala que cerca de la mitad de los compradores de primera vivienda han recurrido a ayuda económica por parte de familiares o amigos para poder cubrir al menos una porción del pago inicial requerido.
La situación se agrava aún más en ciertas regiones del país, siendo el sur de Florida uno de los ejemplos más destacados. En Miami, se estima que los ingresos necesarios para adquirir una vivienda cómodamente rondan los USD 151,163, situándola como la zona con mayor requerimiento económico en este sentido. Otras ciudades de Florida como Orlando, Tampa y Jacksonville muestran también cifras elevadas, necesitando ingresos de USD 121,418, USD 116,329 y USD 109,271 respectivamente para poder aspirar a la compra de una casa.
Contrastando con la realidad de Florida, el informe resalta que las áreas más costosas para adquirir una vivienda en Estados Unidos se encuentran en California, donde los ingresos familiares necesarios sobrepasan los USD 200,000. Ciudades como San José, San Francisco, Los Ángeles y San Diego encabezan esta lista, evidenciando la extrema desigualdad en términos de acceso a la vivienda en comparación con otras regiones del país.
Por otro lado, ciudades como Pittsburgh, Memphis, Cleveland, Nueva Orleans y Birmingham representan las opciones más asequibles, donde los requerimientos de ingreso son considerablemente menores.
Este panorama evidencia las marcadas diferencias y desafíos que enfrentan los ciudadanos estadounidenses al momento de acceder a una vivienda, situación que se ha acentuado en los últimos años debido a múltiples factores económicos y sociales. La actual dinámica del mercado inmobiliario demanda una reflexión integral sobre las políticas de vivienda y el desarrollo de estrategias que permitan equilibrar este complejo escenario.