Un megaproyecto busca solucionar la desaceleración del sector inmobiliario comercial que impactó a Miami en 2023

El mercado de oficinas de Miami, que durante años se mantuvo inmune a los desafíos económicos, está experimentando una desaceleración significativa.

Una investigación de la firma de servicios inmobiliarios comerciales JLL, publicada por The Wall Street Journal (WSJ), reveló que durante el 2023 hubo una disminución del 25% en la actividad de arrendamiento respecto a 2022 y un aumento del 66% en la vacancia de subalquiler hacia finales del año. “Hay una ralentización de la actividad de los nuevos mercados”, dijo al WSJ, Steven Hurwitz, de JLL. “Estamos como en un nuevo punto de inflexión”.

Los intereses crecientes y el modelo de trabajo híbrido han castigado el mercado de oficinas en Estados Unidos, impactando notablemente a ciudades como Miami, la cual había gestionado estos desafíos mejor que la mayoría, gracias a una constante corriente de reubicaciones corporativas y un limitado suministro de edificios de oficinas. Sin embargo, este escenario de excepcionalidad estaría llegando a su fin, con obras de construcción de oficinas desacelerándose después de un pico reciente en el segundo trimestre de 2023.

Juan Arias, director de análisis de mercado para CoStar en el Sur de Florida, destacó que la nueva construcción está siendo afectada por tasas de interés más elevadas, costos aumentados en materiales de construcción y mano de obra, y una desaceleración en la actividad de arrendamiento en medio de un ambiente económico más suave. “El auge de las oficinas está desacelerándose, y las nuevas reubicaciones de compañías también están disminuyendo”, afirmó Arias.

Miami intenta virar de una economía largamente orientada hacia el ocio y turismo hacia una nueva capital de negocios y finanzas. La ciudad ha logrado atraer a firmas financieras y tecnológicas del Noreste de Estados Unidos y otras partes del país.

No obstante, también enfrenta sus desafíos de crecimiento más agudos desde que la pandemia aceleró el auge empresarial. Los precios de viviendas unifamiliares y alquileres han subido en Miami más que en casi cualquier otro lugar, y los costos de seguros de propiedad están disparándose. Estas tendencias dificultan la mudanza de empleados a la ciudad, y los ejecutivos que se trasladan a Miami descubren que las mejores escuelas privadas ya están a su máxima capacidad.

A pesar de recientes fluctuaciones, el mercado de oficinas en Miami se mantiene como uno de los más sólidos de Estados Unidos, cerrando el año pasado con el mayor crecimiento anual de renta de oficinas entre los principales mercados del país. La tasa de vacantes en la ciudad, del 8.4%, se posiciona entre las más bajas en Estados Unidos, evidenciando una robusta absorción neta que supera los 46,450 metros cuadrados de espacio ocupado.

Este dinamismo atrae la atención de importantes inversores, como el presidente de Related, Stephen Ross, quien concentra sus esfuerzos en el desarrollo de nuevos proyectos en el sur de Florida. La construcción de One Brickell City Centre, un impresionante rascacielos de 139,355 metros cuadrados y 68 pisos, destaca entre las iniciativas más ambiciosas en el horizonte de Miami.

Ross describió este proyecto como “el más importante en Miami”, mientras que Henry Bott, presidente de Swire, lo considera “un faro para la ciudad, destacando sus terrazas al aire libre en casi todos los pisos. Previsto para completarse en 2028, el edificio promete marcar un hito en la renovación urbana y el atractivo comercial de la región.

Sin embargo, el One Brickell City Centre en Miami, que promete ser el edificio corporativo más alto de la ciudad, enfrenta dificultades significativas para encontrar un inquilino principal, apenas un año después de su inicio de construcción.

Inicialmente, Ross había dialogado con Ken Griffin, director ejecutivo de Citadel, sobre la posibilidad de trasladar la sede de su firma de hedge fund al mencionado desarrollo. No obstante, tras una serie de negociaciones que también incluyeron discusiones sobre la compra de una participación minoritaria en los Miami Dolphins –equipo del cual Ross es el propietario mayoritario–, Griffin optó por no establecerse en One Brickell City Centre.

En cambio, decidió enfocarse en el desarrollo de su propio sitio frente al mar, adquirido en 2022, con planes que incluyen un hotel de lujo en la parte superior de la torre de oficinas.