En una innovadora iniciativa que desafía el statu quo de los programas de asistencia pública en los Estados Unidos, la ciudad de Flint, en Michigan, lanzó “Rx Kids”, un programa pionero diseñado para fortalecer el bienestar económico y de salud de las madres y sus bebés ofreciendo pagos en efectivo sin condiciones. Cada madre o tutor en Flint recibe un pago inicial de 1.500 dólares, después de las primeras 20 semanas de embarazo, seguido de 500 dólares mensuales durante el primer año de vida del infante. Este proyecto busca combatir la pobreza infantil y mejorar los resultados de salud en una de las comunidades más empobrecidas de Estados Unidos, reportó NPR.
La doctora Mona Hanna-Attisha, reconocida por su papel crucial en la exposición de la crisis del agua con plomo en Flint, es una de las codirectoras de este esfuerzo. La especialista subraya la importancia de este tipo de asistencia directa, explicando que “lo que sucede en ese primer año de vida puede realmente predecir la trayectoria de tu curso de vida”.
Esta iniciativa, según Hanna-Attisha, no solo ofrece un soporte crucial durante un periodo económicamente desafiante para las familias, sino que también establece un fundamento más sólido para el futuro de los niños desde el inicio.
La financiación de “Rx Kids” es fruto de una colaboración público-privada, que incluye aportes significativos de la Fundación Charles Stewart Mott y un uso innovador de la subvención federal Temporary Assistance for Needy Families (TANF) por parte del estado de Michigan.
Hasta ahora, se han recaudado más de 43 millones de dólares, lo que garantiza la implementación del programa por al menos tres años, con la meta de alcanzar los 55 millones de dólares para asegurar su funcionamiento durante cinco años.
PBS indicó que las familias en Flint han enfrentado desafíos monumentales en años recientes, especialmente desde la crisis del agua con plomo que puso en riesgo la salud y el bienestar de sus hijos. Los impactos de esa crisis se siguen sintiendo aún hoy, y programas como “Rx Kids” ofrecen un rayo de esperanza.
Alana Turner, beneficiaria del programa y madre de dos hijos, destaca cómo las dificultades para volver al trabajo poco después de dar a luz y los riesgos para la salud de su familia han marcado profundamente su experiencia como madre en Flint. “Es traumático no sólo para ti, sino para el bebé también”, reveló Turner a NPR, al compartir su experiencia con el estrés postparto y el desafío de mantener la lactancia materna.
Se estima que cada año nacen 1.200 niños en Flint, donde casi el 70% crece en la pobreza. Hanna-Attisha remarcó que este programa universal sin requisitos de ingresos es “un mensaje de confianza en una ciudad donde no hay confianza”, reforzando la apuesta por una visión renovada de cómo cuidarse mutuamente y abordar los problemas de pobreza infantil y resultados de salud adversos desde una perspectiva más proactiva y empoderadora.
El impacto potencial de “Rx Kids” en Flint podría extenderse más allá de sus límites, ya que el Gobierno del estado de Michigan, encabezado por la gobernadora Gretchen Whitmer, ha propuesto expandir una versión de este programa a otras ciudades, demostrando un creciente reconocimiento de la importancia de la inversión en el bienestar infantil y maternal.
(Con información de NPR y PBS)