Un vuelo de United Airlines desde el aeropuerto de Heathrow, en Londres (Inglaterra) hacia el de Newark Liberty International (en Nueva Jersey, Estados Unidos) fue desviado de emergencia este viernes por la mañana hacia Bangor, Maine, después de que la tripulación reportara un incidente crítico a bordo provocado por un pasajero problemático.
Según informes de la administración aérea (FAA), el vuelo UA 883 aterrizó alrededor de las 10:00 horas locales, indicando la presencia de comportamiento que amenazaba la vida a bordo, un evento clasificado como una amenaza de nivel 3. Este tipo de advertencia se utiliza para describir comportamientos potencialmente letales o la presencia de armas.
De acuerdo con lo reportado por Flight Aware, el Boeing 767 descendió en el Aeropuerto Internacional de Bangor a las 9:59 horas, casi 90 minutos antes de su llegada programada a Newark.
La decisión de desviar el vuelo se tomó como medida para manejar a un pasajero que se había vuelto incontrolable, apuntando Flight Radar que el avión estaba programado para retomar su ruta hacia su destino, poco después de resolver la situación.
New York Post señaló que el incidente provocó una rápida respuesta del equipo a bordo, que inició un descenso rápido y emitió un código 7700 de squawk, alertando a los controladores de tráfico aéreo de una situación crítica en vuelo.
Esto llevó a los controladores a preparar el cambio de curso y coordinar con los servicios de emergencia en tierra para el aterrizaje en Bangor. Un operativo de seguridad, que incluía la presencia de fuerzas del orden locales, esperaba en tierra como medida de precaución.
Los detalles específicos en torno al comportamiento problemático del pasajero y la naturaleza exacta del incidente aún no se han revelado. Al momento, tanto United Airlines como el aeropuerto de Bangor no han respondido a solicitudes de comentarios sobre el incidente.
Este incidente subraya los desafíos que enfrentan las aerolíneas y las tripulaciones en la gestión de pasajeros disruptivos y la importancia de un protocolo eficaz para garantizar la seguridad y el bienestar de todos a bordo. La eficacia de las respuestas a emergencias de este tipo es crucial para minimizar el impacto en los pasajeros y las operaciones de vuelo.
(Con información de New York Post, Mirror UK, WABI5, y ABC News).