Estados Unidos expresó este martes su “profunda preocupación” por las órdenes de arresto y las detenciones por parte de la dictadura de Maduro de al menos 33 venezolanos, entre ellos opositores, activistas, ex militares y periodistas.
“Las detenciones sin el debido proceso van en contra del espíritu del acuerdo de hoja de ruta electoral de octubre de 2023 firmado entre la Plataforma Unitaria y representantes de Nicolás Maduro”, señaló Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado.
Ese acuerdo, que comprometía a Maduro a facilitar unos comicios limpios, llevó a Estados Unidos a suavizar algunas de las sanciones que había impuesto al régimen chavista.
El gobierno de Joe Biden ha estado vigilando de cerca el cumplimiento de los compromisos por parte de los chavistas y ha advertido que las acciones que vayan en contra del espíritu y la letra del Acuerdo de Barbados tendrán consecuencias.
En un comunicado difundido este martes, Estados Unidos reclamó “el cese del hostigamiento político, incluidos los ataques a las sedes de campaña de la oposición y todos los intentos de ahogar las aspiraciones democráticas del pueblo venezolano con miedo e intimidación”.
“Instamos a Maduro y sus representantes a adherirse al acuerdo de la hoja de ruta electoral, incluso anunciando un cronograma claro para las elecciones presidenciales de 2024, y a restituir a todos los candidatos políticos”, se lee en el texto.
Por su parte, el fiscal general impuesto por la dictadura de Maduro, Tarek William Saab, informó el lunes que más de treinta personas, entre civiles y militares, fueron detenidas en Venezuela desde mayo de 2023 por su presunta participación en cinco planes conspirativos, que incluían el asesinato de Maduro y ataques a instalaciones militares.
Estas detenciones se producen una semana después de que el régimen chavista anunciara ante el Parlamento que habían neutralizado cuatro “conspiraciones golpistas”.
La candidata presidencial de la principal coalición opositora, María Corina Machado, calificó estos planes como “tramas surrealistas y delirantes”.
Machado sigue inhabilitada para ocupar cargos públicos a pesar de haber obtenido un apoyo abrumador en unas elecciones primarias celebradas el pasado mes de octubre.
Manifestaciones de calle
El chavismo y la oposición mostraron sus fuerzas este martes con sendas movilizaciones en Caracas y varias regiones de Venezuela, de cara a unas elecciones presidenciales previstas para el segundo semestre del año, aún sin una fecha definida.
Ambos bandos políticos salieron a las calles de un país que un día como hoy, hace 66 años, derrocó a la dictadura de Marcos Pérez Jiménez (1953-1958) y que se prepara para una contienda electoral que determinará la continuidad o el fin del chavismo, que el próximo mes llegará al cuarto de siglo en el poder.
En Caracas, los simpatizantes del chavismo, que suelen realizar sus actividades en el centro de la ciudad, decidieron partir desde una zona históricamente opositora, cerca de la plaza Altamira, donde la candidata de la principal coalición antichavista, tenía previsto un acto.
Pero, desde temprano, el oficialismo instaló justo al frente de este lugar una tarima con grandes bocinas, por lo que la oposición se vio obligada a moverse unos metros más lejos para evitar la “confrontación”.
La ex diputada aseguró frente a cientos de simpatizantes que Maduro “tiene terror” a las elecciones de este año, en las que el líder chavista no ha confirmado si buscará una segunda reelección.
Más tarde, Maduro habló frente a miles de personas que se congregaron en el centro de la ciudad y aseguró que va a “seguir gobernando este país con el apoyo de los venezolanos”, sin aclarar si se refiere a una aspiración de un sexenio más en el poder.
(Con información de AFP y EFE)