Líderes del Congreso de Estados Unidos alcanzaron un acuerdo para implementar una ley de financiamiento a corto plazo en dos tramos, con el objetivo de evitar una paralización del gobierno y asegurar su funcionamiento hasta marzo. Una fuente compartió con CNN que el nuevo proyecto de ley de asignaciones provisionales permitirá financiar las operaciones gubernamentales hasta el 1 de marzo y, en un segundo tramo, hasta el 8 de marzo.
El entendimiento llega justo antes del primer plazo de financiamiento del 19 de enero y el segundo plazo del 2 de febrero. Los republicanos de la Cámara sostendrán una conferencia telefónica el domingo por la noche para discutir los detalles de la resolución.
Un portavoz del líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, informó que se espera que el texto completo de la resolución sea publicado el domingo por la noche. Previamente, Schumer y el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, anunciaron que habían alcanzado un acuerdo en las cifras globales del gasto, constituyendo el primer paso en el proceso de financiamiento del gobierno federal.
Los números propuestos en el acuerdo incluyen 1,59 billones de dólares para el año fiscal 2024, desglosados en 886 mil millones de dólarespara gastos de defensa y 704 mil millones de dólares para gasto no relacionado con la defensa. Además, Schumer y Johnson acordaron un ajuste adicional de 69 mil millones de dólares que se destinarán a gastos domésticos no relacionados con la defensa.
No obstante, miembros del ala más dconservadora del grupo parlamentario republicano de la Cámara criticaron duramente el acuerdo y algunos han presionado para incluir cambios en la política de fronteras a cambio de no cerrar el gobierno. Esta oposición subraya los retos a los que se enfrenta Johnson, quien lidera una mayoría extremadamente estrecha.
Johnson confirmó el viernes que el acuerdo se mantiene vigente después de que pareciera contemplar la posibilidad de abandonarlo en reuniones con conservadores. Este pacto representa un esfuerzo por mantener las operaciones estatales funcionando mientras se superan las discrepancias internas en el partido.
La resolución provisional, que busca ser un parche temporal al financiamiento gubernamental, es reflejo de las dificultades del proceso presupuestario en el contexto político actual de Estados Unidos, donde las divisiones partidarias y las demandas de diferentes facciones complican el logro de consensos duraderos. El acuerdo, todavía pendiente de confirmaciones y posibles ajustes, mantiene en vilo el funcionamiento de múltiples agencias federales que dependen de estos fondos para operar plenamente.