Doug Band, exasesor cercano al expresidente de Estados Unidos Bill Clinton, está en la lista de los 177 individuos entre amigos, reclutadores y víctimas vinculados con el convicto pedófilo Jeffrey Epstein, que será revelada en enero tras una decisión judicial. Según publicó el diario británico Daily Mail, los documentos que exponen su conexión serán divulgados como parte de un nuevo lote de archivos ordenados a hacerse públicos por la jueza Loretta Preska de Nueva York.
Band trabajó en la oficina del Consejo de la Casa Blanca durante la presidencia de Clinton, antes de ser su asesor jefe desde 2002 a 2011. Además de ayudar a reconstruir la imagen de Clinton tras la presidencia y el escándalo de Monica Lewinsky, Band acompañó a Clinton en viajes controvertidos, incluido uno a África en 2002 en el avión privado de Epstein, conocido como ‘Lolita Express’. Este conjunto de archivos podría arrojar nueva luz sobre las interacciones del expresidente con Epstein.
Más de 170 personas vinculadas a Epstein se espera sean identificadas en la documentación, incluyendo gestores de su isla privada y testigos de los crímenes del financiero fallecido. Entre ellos, se mencionan asociados de alto perfil y la mujer que testificó en el juicio de 2021 de Ghislaine Maxwell, colaboradora de Epstein condenada a 20 años de prisión. Otros podrían ser poderosos amigos de Epstein: se sabe que el pederasta se relacionó con Clinton, el ex primer ministro israelí Ehud Barak y el príncipe británico Andrés.
En el trabajo post-presidencia, Band colaboró con Clinton en el establecimiento de la Clinton Global Initiative, que recaudó millones para buenas causas. También se le relaciona con algunas reuniones del expresidente con Epstein. De una de estas hay pruebas, se trata de una serie de fotografías de un viaje a África en las que se observa a Clinton recibiendo un masaje de Chauntae Davies, una de las víctimas de Epstein que trabajaba como azafata en el avión.
Posteriormente, Clinton describió a Epstein como un “financiero de gran éxito y filántropo comprometido, con un agudo sentido de los mercados mundiales y un profundo conocimiento de la ciencia del siglo XXI”, según lo publicado por Daily Mail.
Información desclasificada
La jueza Preska ordenó la desclasificación de documentos relacionados con el caso de difamación de 2015 contra Ghislaine Maxwell, seguido de la demanda de Virginia Roberts, quien acusó al príncipe Andrew. La desclasificación ocurrió después de que el Miami Herald litigara para hacer públicos los documentos del caso, que se han ido liberando paulatinamente desde 2019.
En un giro significativo, Doug Band, identificado como John Doe número ocho, ve revelada su implicación tras una entrevista en Vanity Fair en 2020 sobre sus interacciones con Jeffrey Epstein, que Preska considera un factor para no mantener sellada la información.
Doug Band, abogado y empleado de una firma de capital de riesgo, trabajó estrechamente con el expresidente desde su pasantía en la Casa Blanca a los 22 años. Según relató en Vanity Fair, Band intentó disuadir al exmandatario de seguir asociándose con Epstein después de un viaje a África en 2002 en el avión privado del financiero. En total, el financista donó 25.000 dólares a la Fundación Clinton en 2006 y Clinton continuó utilizando su avión, Band aconsejó cortar vínculos mucho antes de que salieran a la luz los crímenes de Epstein.
Todo parece indicar que la relación del expresidente y su familia, con Epstein y su círculo, era muy cercana. Chelsea Clinton mantuvo una relación de amistad con Ghislaine Maxwell, en la que se le vio asistiendo a eventos como la boda del rey de Marruecos junto a ella y Epstein. A pesar de que Epstein se convirtió en un delincuente sexual registrado tras su condena en 2008, Maxwell fue invitada a la boda de Chelsea Clinton más tarde en 2010. Band reveló que en 2011 instó a la oficina de Clinton a excluir a Maxwell de todos los eventos relacionados con la familia, con el objetivo de distanciarla de Chelsea y evitar la controversia.
Tras el suicidio de Jeffrey Epstein en 2019 mientras esperaba juicio por cargos de tráfico sexual, el expresidente Clinton volvió a ser objeto de análisis por sus vínculos con Epstein. La policía encontró en la mansión neoyorquina de Epstein un inusual cuadro del expresidente vestido con un traje azul. Un portavoz negó cualquier comportamiento inapropiado de Clinton y afirmó que no estaba al tanto de los “terribles crímenes” de Epstein.