El ex mandatario estadounidense Donald Trump (2017-2021) prometió este sábado iniciar un gran operativo de deportación de inmigrantes en su primer día en el cargo en caso de ser reelegido.
Trump, que sigue siendo el favorito para la nominación presidencial republicana para las elecciones de 2024, usó nuevamente el tema migratorio para ganar adeptos en un mitin en New Hampshire, a poco menos de seis semanas de que se realicen las primarias en ese estado.
“En mi primer día de regreso a la Casa Blanca voy a poner fin a todas las políticas de fronteras abiertas de la Administración Biden, voy a parar la invasión por la frontera sur y comenzaré la más grande y masiva operación de deportación en el país”, dijo el exmandatario.
Aunque el republicano no dedicó mucho tiempo a dar detalles sobre su plan de deportación, el mensaje llega justo cuando el Gobierno del presidente Joe Biden está en negociaciones con senadores de la oposición para endurecer el sistema de asilo a cambio de que le apoyen un gasto de unos 60.000 millones de dólares para Ucrania.
La frontera sur de EEUU vive por estos días un mayor flujo de migrantes, especialmente en Arizona, lo que ha obligado a la gobernadora de ese estado, la demócrata Katie Hobbs, a enviar a la Guardia Nacional.
Trump arremetió nuevamente este sábado contra Biden y su política exterior. Subrayó que, en caso de ganar, restaurará la prohibición a viajeros extranjeros que no estén de acuerdo con la política estadounidense y la de Israel, una medida tomada en su primer mandato que originó varias demandas.
Rechazo de hispanos
Una encuesta de la Universidad Internacional de Florida (FIU) difundida el miércoles pasado señaló que la mayoría de los hispanos en Estados Unidos no quieren al ex presidente Donald Trump ni al presidente Joe Biden en las boletas de las elecciones presidenciales de 2024.
El sondeo, realizado del 18 de noviembre al 3 de diciembre entre 1.221 electores registrados y seleccionados de manera aleatoria en los 22 estados con las mayores concentraciones de latinos, indicó que si bien la mayoría de los hispanos siguen siendo demócratas registrados, el apoyo al partido “se está erosionando”, como recoge un comunicado.
Muchos hispanos están comenzando a alejarse por completo de las afiliaciones partidistas, en la que es una tendencia que refleja un mayor impacto en las filas demócratas, de acuerdo con investigadores de la FIU.
Los hispanos encuestados mostraron poco entusiasmo por los dos previsibles candidatos en la elección presidencial del año próximo, como son el actual presidente de EEUU, el demócrata Joe Biden, y el previsible ganador de la primarias republicanas, Donald Trump.
Un 45 % de los encuestados dijeron que Biden no debería contender a la Presidencia, mientras que el 57 % señaló que no quiere ver a Trump en la cartilla de votación.
De acuerdo con la encuesta, realizada con la colaboración de la firma Adsmovil, el 52,9 % de los electores hispanos creen que el país avanza en la dirección equivocada. Las principales preocupaciones son la inflación, la economía y la inmigración.
De los entrevistados, un 19,8 % identificaron a la inflación como un asunto clave, mientras que un 16,6 % ven a la economía como una preocupación fundamental y un 7,5 % que cree que la inmigración –específicamente la “inmigración irrestricta”- es la principal amenaza de seguridad, incluso más que el terrorismo.
Carlos Díaz Rosillo, director del Centro Adam Smith para la Libertad Económica de la FIU, dijo que “a medida que las comunidades hispanas en Estados Unidos comienzan a calentar sus músculos políticos en la política presidencial, ambos partidos harían bien en invertir más tiempo, esfuerzo y recursos en estas comunidades”.
(Con información de EFE)