En un movimiento de gran relevancia en la historia legislativa de Florida, los votantes del estado podrían encontrarse en una posición única para decidir sobre la legalización de la marihuana recreativa en las elecciones de 2024, de acuerdo a medios locales. Actualmente, la Corte Suprema de Florida se encuentra en un proceso de evaluación sobre la inclusión de una enmienda en la boleta electoral que, de ser aprobada, permitiría el uso recreativo de la marihuana.
La propuesta, conocida como Enmienda 22, fue debatida en una audiencia reciente, donde se presentaron los argumentos tanto de la Oficina del Fiscal General de Florida, entidad que impugna la reforma, como del grupo promotor de la misma. Este debate judicial es un preludio a una decisión esperada en las próximas semanas, que determinará si la enmienda llegará a manos de los votantes.
De acuerdo con información de la Oficina de Uso de Marihuana Medicinal del Departamento de Salud de Florida, difundida por medios locales, aproximadamente 860 mil pacientes están autorizados para adquirir marihuana de manera legal en el estado. Todos los pedidos de marihuana medicinal se gestionan y suministran a través del Registro estatal de Uso de Marihuana Medicinal. En la actualidad, existen cerca de 600 dispensarios con licencia en Florida, administrados por varias empresas. La compañía más grande en este ámbito es Trulieve, que cuenta con 129 dispensarios, según con los últimos datos disponibles.
Restricciones de la Enmienda 22
La Enmienda 22, en su redacción actual, contempla permitir a los adultos de 21 años o más la posesión, cultivo y consumo de marihuana recreativa. Además, autorizaría la venta de esta sustancia en tiendas minoristas específicamente autorizadas. Sin embargo, esta liberalización viene acompañada de restricciones específicas para regular su uso:
Venta a menores prohibida: se prohíbe terminantemente la venta de marihuana recreativa a personas menores de 21 años.
Prohibición en lugares públicos: fumar marihuana recreativa en lugares públicos, como escuelas, parques y lugares de trabajo, estaría estrictamente prohibido.
Restricciones de conducción: conducir bajo la influencia de marihuana recreativa sería ilegal.
Impuesto al consumo: la venta de marihuana recreativa estaría sujeta a un impuesto del 15%.
Autorizaciones de la Enmienda 22
La aprobación de esta reforma simbolizaría un triunfo significativo para los defensores de la legalización de la marihuana recreativa en Florida, lo que situaría al estado como el número 31 en Estados Unidos en legalizar su uso recreativo. Según la propuesta, los adultos de 21 años o más podrían poseer hasta poco más de 70 gramos de marihuana y se les permitiría cultivar hasta seis plantas en sus hogares. Las tiendas minoristas autorizadas podrán vender marihuana recreativa, lo que excluye los productos comestibles de cannabis.
Importante es destacar que los fondos recaudados por el impuesto del 15% propuesto se destinarían a financiar programas de salud pública y educación. Este detalle no solo habla de una potencial fuente de ingresos para el estado, sino también de un enfoque integral que busca balancear la legalización con responsabilidad social y sanitaria.
Cargos por drogas de marihuana en Florida
Si alguien posee menos de 20 gramos de marihuana, generalmente será acusado de un delito menor. Sin embargo, si se encuentra con 20 gramos o más, hasta 11 kilos (25 libras), la acusación se eleva a un delito grave. Esta última infracción puede conllevar una pena de hasta cinco años de prisión y una multa máxima de USD 5 mil.
Además, aquellos encontrados con objetos relacionados con el consumo de marihuana, como parafernalia, podrían enfrentar un delito menor, sancionable con hasta un año de prisión y una multa de hasta USD 1.000.
En ciertas circunstancias, las acusaciones podrían elevarse al nivel federal, por ejemplo, si la detención ocurre en un lugar federal como una base militar o un parque nacional. Los cargos federales por drogas suelen ser más severos, y los acusados se enfrentan a penas estrictas.
En cuanto al tráfico de cannabis, este se basa en la cantidad en posesión, más que en la intención. Poseer 11 kilos (25 libras) o más de marihuana, o intentar venderla, puede resultar en acusaciones de tráfico de cannabis. Los condenados por tráfico a menudo enfrentan sentencias mínimas obligatorias, lo que significa largas condenas en prisión.