Brightline, el servicio de tren de pasajeros de alta velocidad de Florida, ha anunciado recientemente su intención de añadir una nueva parada en su extensión que conecta el sur de Florida con Orlando. La empresa está en la fase de solicitud de propuestas para determinar la ubicación exacta de esta nueva estación, que se situará en uno de los condados de la Costa del Tesoro de Florida, ya sea Martin o St. Lucie.
Este proyecto tiene como objetivo principal ofrecer una opción de transporte más accesible para las áreas menos densamente pobladas y con menor afluencia turística, en comparación con las regiones más concurridas del sur de Florida y Orlando.
Michael Reininger, director ejecutivo de Brightline, indicó a AP News que la expansión hacia la Costa del Tesoro hará que el servicio de tren sea accesible para casi la mitad de la población de Florida. Según datos de la misma fuente, desde la inauguración de la extensión que conecta Miami con Orlando el mes pasado, más de 17,500 pasajeros de larga distancia han utilizado el servicio. Este número es un indicativo del creciente interés y la necesidad de opciones de transporte más eficientes en el estado.
Este proyecto de expansión posiciona a Brightline como el primer servicio de pasajeros interurbano privado en iniciar operaciones en Estados Unidos en un siglo. Este hecho no solo es un hito para la empresa sino también para el sector del transporte en el país, que ha visto pocos avances significativos en términos de servicios ferroviarios interurbanos en las últimas décadas.
Además de sus operaciones en Florida, Brightline tiene planes más ambiciosos a nivel nacional. Según informó WSVN 7News, la empresa está en las etapas de desarrollo de una línea de alta velocidad que conectará el sur de California con Las Vegas.
Este proyecto, que se espera esté operativo para el año 2027, contará con trenes que alcanzarán velocidades de hasta 305 km/h (190m/h aproximadamente). Este nuevo servicio se sumará a la corta lista de opciones de trenes de alta velocidad en Estados Unidos, siendo la única otra línea de este tipo la Acela de Amtrak, que opera entre Boston y Washington, D.C. y es propiedad del gobierno federal.
La expansión de Brightline no solo busca mejorar la conectividad dentro del estado de Florida sino que también forma parte de un plan más amplio para revolucionar el transporte ferroviario interurbano en Estados Unidos. Con proyectos en desarrollo que incluyen conexiones de alta velocidad en otros estados, Brightline se está posicionando como un actor clave en el futuro del transporte público en el país.