En medio de una de las peores crisis económicas y políticas que Cuba ha enfrentado desde que Fidel Castro instauró el comunismo hace más de sesenta años, cerca de 425,000 cubanos han migrado a Estados Unidos en los últimos dos años fiscales, según las últimas cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP). Este fenómeno representa una crisis migratoria de proporciones históricas que pone en evidencia los desafíos que enfrenta la administración de Biden en su intento por contener los desplazamientos provocados por gobiernos autoritarios y convulsiones políticas en el hemisferio occidental.
Según estadísticas de la dictadura cubana, la población de la isla era de 11,113,215 personas al finalizar diciembre de 2021. El éxodo masivo en los últimos dos años equivale a casi el 4% de la población total de Cuba, una magnitud comparable a si todos los residentes de la provincia central de Cienfuegos abandonaran la isla. La CBP informó que en el año fiscal 2023, que finalizó en septiembre, se registraron 200,287 encuentros con cubanos en las fronteras de Estados Unidos. En el año fiscal 2022, se reportaron otros 224,607 encuentros con nacionales cubanos, según datos de El Nuevo Herald.
La crisis migratoria no se limita a Cuba. En los últimos dos años fiscales, más de un millón de personas de Venezuela, Nicaragua y Haití también han llegado a las fronteras de Estados Unidos. Diversos factores, como desastres naturales, inestabilidad política y dificultades económicas, han contribuido al deterioro de las condiciones de vida en estos países, según información de El Nuevo Herald.
La administración de Biden ha implementado programas de libertad condicional que permiten a los ciudadanos de estos países venir a Estados Unidos durante un período de dos años, siempre que pasen controles de salud y antecedentes, entre otros requisitos. Más de 241,000 personas han llegado a Estados Unidos utilizando estos programas en el último año fiscal. Sin embargo, estas cifras representan solo una fracción del número total de migrantes.
El gobierno de Estados Unidos también está tomando medidas diplomáticas para abordar algunas de las causas fundamentales de esta ola sin precedentes de migrantes provenientes de estos cuatro países. Esto incluye negociaciones con Venezuela para levantar parcialmente las sanciones de Estados Unidos a cambio de compromisos para celebrar elecciones libres y justas.