La madrugada del 12 de octubre, dos tornados pasaron por la costa centro-oeste de Florida, lo que dejó a su paso daños en viviendas, comercios y automóviles. Mientras tanto, en el área de la Bahía de Tampa, un clima severo mantiene en alerta a los residentes.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) informó que dos tornados tocaron tierra, uno en el condado de Pinellas y el otro en el condado de Citrus. Estos eventos meteorológicos han generado preocupación entre la población local.
En Clearwater Beach, un probable tornado provocó daños en al menos dos casas, aunque afortunadamente no se reportaron heridos. Una mujer de 90 años que se encontraba en su hogar resultó ilesa a pesar de que la tormenta derribó una pared y el techo de su casa sobre ella.
“Se despertó con el sonido de cristales rompiéndose”, relató a CNN el portavoz de Clearwater Fire and Rescue, Rob Shaw. “Se cubrió la cabeza con las mantas y capeó la tormenta”, añadió.
En Dunedin, al norte de Clearwater Beach, también se reportaron daños como líneas eléctricas caídas y edificios con paredes y techos faltantes, según informaron las autoridades locales.
En Crystal River, otro tornado afectó y destruyó numerosos negocios y viviendas en la ciudad. El alcalde de Crystal River, Joe Meek, señaló en conferencia de prensa, que, a pesar de la magnitud de los daños, no se han reportado heridos graves ni víctimas fatales, lo cual es un hecho notable.
Los funcionarios del condado de Citrus informaron que la mayoría de las carreteras que habían sido cerradas debido a las consecuencias de los tornados, como líneas eléctricas caídas, árboles y escombros, han sido reabiertas. Sin embargo, las clases en todo el condado fueron canceladas debido a los daños.
Millones de residentes de Florida estuvieron bajo vigilancia de tornado hasta la tarde del 12 de octubre, debido al pico de amenaza de tornados. Las autoridades instan a la población a mantenerse informada y tomar las precauciones necesarias en medio de estas condiciones meteorológicas desafiantes. La evaluación de los daños y la determinación de la fuerza de los tornados seguirán siendo una prioridad para las autoridades locales y el Servicio Meteorológico Nacional.