Este miércoles 27 de septiembre se define el destino del mundialmente famoso club diurno Nikki Beach, ubicado en Ocean Drive, South Beach, Miami Beach. Los comisionados de Miami Beach decidirán qué proveedor tomará las riendas de la institución una vez que concluya el contrato de arrendamiento del operador actual en 2026.
La propiedad ha estado bajo el control de la familia Penrod desde 1985. Sin embargo, la ciudad rechazó la oferta de renovación de los mismos a principios de este mes, lo que argumenta que no presentaron los documentos necesarios en el plazo establecido. La decisión podría significar el fin de una era para el club de playa.
La votación de los comisionados llega en un momento en que Miami Beach está tratando de cambiar su imagen, tomando medidas enérgicas contra establecimientos ruidosos.
Propuesta de Boucher Brothers
Boucher Brothers, un proveedor de servicios de playa en el sur de Florida, tiene planes de invertir más de USD 26 millones en mejoras para el emplazamiento. La empresa tiene la intención de colaborar con Major Food Group, dueño de establecimientos gastronómicos como Carbone, para gestionar dos locales de comida y una cafetería en el sitio.
El proyecto, bajo el nombre de “Pier Park”, contempla además la inclusión de instalaciones dedicadas al bienestar y al cuidado de niños. A lo largo de un contrato de diez años, Boucher Brothers se compromete a abonar al menos USD 41 millones en alquiler a la municipalidad.
Si se llega a un acuerdo, este concesionario asumiría el control de Nikki Beach en mayo de 2026. Este cambio podría significar una transformación significativa en la cultura y el paisaje de uno de los destinos turísticos más destacados de Miami Beach.
Competidores y Controversia
Pese a que Boucher Brothers se encuentra en una posición favorable, no es la única empresa en la contienda. Tao Group Hospitality, RH y The Group US Management también han presentado propuestas para la gestión del sitio.
Es importante destacar que la familia Penrod, antiguos propietarios de Nikki Beach, presentaron una demanda legal en mayo contra la ciudad de Miami Beach y Boucher Brothers. En ella, acusaban a ambas partes de alcanzar un “acuerdo entre bastidores”. No obstante, la demanda fue desestimada por un juez en el mes de agosto.
Los comisionados de la ciudad habían optado en abril por explorar un acuerdo preliminar no vinculante con Boucher Brothers. Pero, esta decisión fue revertida tras recibir críticas del público. La administración municipal fue entonces instruida para abrir el proceso de licitación del espacio en cuestión.