Casi la mitad del agua del grifo en Estados Unidos está contaminada con “químicos para siempre”, según un nuevo estudio

El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) ha descubierto que el 45% contiene perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS). Estas sustancias sintéticas se han asociado a una serie de problemas de salud

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El estudio sobre contaminación del agua realizado por el Servicio Geológico de los Estados Unidos incluyó tanto pozos privados como fuentes de agua pública.
El estudio sobre contaminación del agua realizado por el Servicio Geológico de los Estados Unidos incluyó tanto pozos privados como fuentes de agua pública.

Casi la mitad del agua del grifo en los Estados Unidos está contaminada con químicos conocidos como “químicos para siempre”, según un nuevo estudio del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS). Estos compuestos, también conocidos como sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS), son considerados peligrosos para la salud humana y se encuentran en cientos de artículos domésticos, desde productos de limpieza hasta cajas de pizza.

Las PFAS son una familia de químicos sintéticos omnipresentes que persisten en el medio ambiente y en el cuerpo humano. La exposición a las PFAS se ha relacionado con problemas como el cáncer, la obesidad, la enfermedad de la tiroides, el colesterol alto, la disminución de la fertilidad, el daño hepático y la supresión hormonal, según la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA).

El estudio del USGS, que es el más completo hasta la fecha, incluyó tanto pozos privados como fuentes de agua pública. Los científicos recolectaron muestras directamente de los grifos en 716 ubicaciones (50 estados del país), 269 de pozos privados y 447 de fuentes públicas, entre 2016 y 2021. Basándose en sus hallazgos, estiman que al menos un químico PFAS sería detectado en el 45% de las muestras de agua potable de EE.UU..

La mayor parte de la contaminación provenía de fuentes de agua cerca de áreas urbanas y en áreas que generaban PFAS, como la fabricación que utiliza los químicos en sus productos o sitios donde se recolectaba residuos. En comparación con las personas en áreas rurales, aquellas en áreas urbanas corren un mayor riesgo de exposición a las PFAS en el agua potable, según reportó Reuters.

La EPA ha propuesto las primeras normas nacionales de agua potable para seis químicos PFAS. Las propuestas establecen los niveles permitidos para estos químicos tan bajos que no podrían ser detectados fácilmente. Casi USD 10 mil millones fueron dirigidos para ayudar a las comunidades a reducir las PFAS y otros contaminantes químicos como parte de la Ley de Infraestructura Bipartidista de la administración de Biden.

El estudio también encontró que las áreas urbanas y las áreas cercanas a posibles fuentes de PFAS, como la industria o los sitios de residuos, tienen más probabilidades de tener niveles más altos de PFAS, según detalló CBSNews. La exposición al agua potable puede ser más común en las Grandes Llanuras, los Grandes Lagos, la Costa Este y el centro y sur de California, según el estudio.

A pesar de la gravedad de la situación, los expertos aconsejan que las personas no necesariamente deben tener miedo, pero sí deben estar informadas y armarse con conocimientos para tomar decisiones, según consigna CNN.

El estudio también reveló que las áreas cercanas a posibles fuentes de PFAS, como la industria o los sitios de residuos, tienen más probabilidades de tener niveles más altos de contaminación (REUTERS/Eric Thayer)
El estudio también reveló que las áreas cercanas a posibles fuentes de PFAS, como la industria o los sitios de residuos, tienen más probabilidades de tener niveles más altos de contaminación (REUTERS/Eric Thayer)

Cómo evitar las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas

Las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) son químicos sintéticos que se encuentran en muchos productos de uso diario, lo que hace que evitarlos por completo sea un desafío. Sin embargo, hay varias estrategias que puedes seguir para minimizar tu exposición a estas sustancias:

  1. Evita productos que sean resistentes al agua, la grasa o las manchas: muchos productos que tienen estas propiedades, como la ropa impermeable, los utensilios de cocina antiadherentes, las cajas de pizza y las palomitas de maíz para microondas, pueden contener PFAS.
  2. Elige muebles sin tratamientos resistentes a las manchas: algunos muebles y alfombras se tratan con PFAS para hacerlos resistentes a las manchas. Al comprar nuevos muebles, busca aquellos que no tengan este tipo de tratamiento.
  3. Filtra tu agua: si vives en un área donde el agua potable puede estar contaminada con PFAS, considera instalar un sistema de filtración de agua en tu hogar. Los sistemas de ósmosis inversa y los filtros de carbón activado han demostrado ser efectivos para eliminar las PFAS del agua.
  4. Come alimentos frescos: las PFAS pueden encontrarse en algunos envases de alimentos, especialmente aquellos que son resistentes a la grasa. Al comer alimentos frescos y evitar los alimentos procesados y envasados, puedes reducir tu exposición a estas sustancias.
  5. Evita productos de limpieza y cosméticos que contengan PFAS: algunos productos de limpieza y cosméticos pueden contener PFAS. Lee las etiquetas y busca productos que estén libres de estas sustancias.
  6. Infórmate: la información sobre qué productos contienen PFAS puede cambiar con el tiempo a medida que se realizan más investigaciones y se implementan nuevas regulaciones. Mantente informado sobre las últimas noticias y estudios sobre las PFAS para poder tomar decisiones informadas.

Aunque estas estrategias pueden ayudarte a reducir tu exposición a las PFAS, puede ser difícil evitar estas sustancias por completo debido a su uso generalizado.

¿Dónde se encuentran los PFAS?

  • Agua potable: las PFAS pueden infiltrarse en el suministro de agua a través de la escorrentía de sitios industriales, vertederos de residuos y campos de tratamiento de aguas residuales.
  • Productos resistentes a las manchas y al agua: muchos productos que son resistentes al agua, a las manchas o a la grasa, como la ropa impermeable, las alfombras y los muebles, pueden contener PFAS.
  • Utensilios de cocina antiadherentes: algunos utensilios de cocina antiadherentes están hechos con PFAS para proporcionar una superficie que no se pegue.
  • Productos de limpieza: algunos productos de limpieza pueden contener PFAS.
  • Envases de alimentos: algunos envases de alimentos, especialmente aquellos que son resistentes a la grasa, como las cajas de pizza y las bolsas de palomitas de maíz para microondas, pueden contener PFAS.
  • Productos de extinción de incendios: algunos tipos de espuma de extinción de incendios, especialmente las espumas de lucha contra incendios de clase B, contienen PFAS.
  • Productos industriales: las PFAS se utilizan en una variedad de procesos industriales debido a sus propiedades resistentes al calor, al agua y a las manchas.

¿Qué efectos tienen las sustancias químicas PFAS en el organismo?

Las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) pueden tener varios efectos en el organismo humano. Según la Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades (ATSDR), los estudios en animales han encontrado que las PFAS pueden causar daño al hígado y al sistema inmunológico. También se ha observado que las PFAS causan bajo peso al nacer, defectos de nacimiento, desarrollo retardado y muertes de recién nacidos en animales de laboratorio.

Es importante tener en cuenta que los humanos y los animales pueden reaccionar de manera diferente a las PFAS, y no todos los efectos observados en los animales pueden ocurrir en los humanos. Los científicos tienen formas de estimar cómo la exposición y los efectos en los animales se comparan con lo que serían en los humanos. La investigación adicional puede cambiar nuestra comprensión de la relación entre la exposición a las PFAS y los efectos en la salud humana.

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