La venta directa de vehículos al consumidor queda prohibida en Florida

El gobernador Ron DeSantis firmó la nueva ley que ofrece una sólida protección al sistema establecido de concesionarios de automóviles pero que muchos interpretan como un revés para los fabricantes de automóviles y para los compradores

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Mediante la nueva ley, los fabricantes no pueden vender directamente sus automóviles en la Florida sino que deben hacerlo a través de una concesionaria REUTERS/Mike Blake
Mediante la nueva ley, los fabricantes no pueden vender directamente sus automóviles en la Florida sino que deben hacerlo a través de una concesionaria REUTERS/Mike Blake

Hay una nueva legislación automotriz en la Florida. El proyecto de ley, convertido en ley con la firma del gobernadora Ron DeSantis, contiene disposiciones que prohíben a los fabricantes de automóviles que ya tienen un modelo de distribución a través de concesionarios, ofrecer ventas directas al consumidor.

Asimismo, establece requisitos para que los concesionarios sean compensados por las actualizaciones posteriores a la venta de los vehículos y los resguarda de los precios establecidos por el fabricante en caso de que este decida reducir los márgenes de beneficio. El objetivo de la ley es proteger a los concesionarios de automóviles que son intermediarios en la transacción entre el fabricante y el comprador.

Hay marcas que quedan exentas de la legislación

Cabe destacar que fabricantes de automóviles como Tesla, Rivian y otros que ya operan mediante ventas directas al consumidor sin contar con concesionarios establecidos, no se ven afectados por esta nueva ley. Esta disposición se aplica únicamente a los fabricantes de automóviles tradicionales que tienen franquicias existentes, con el fin de evitar que los consumidores eludan a los concesionarios durante su proceso de compra.

Marcas como Tesla, cuyo modelo siempre fue de venta directa, quedan exentas de la nueva ley. REUTERS/Carlo Allegri
Marcas como Tesla, cuyo modelo siempre fue de venta directa, quedan exentas de la nueva ley. REUTERS/Carlo Allegri

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“Con esta medida, hemos establecido claramente una distinción entre un fabricante que nunca ha tenido concesionarios y tal vez nunca los tenga, y aquellos que han dependido en gran medida de sus concesionarios para representarlos en términos de marketing y ventas en Florida”, afirmó Ted Smith, presidente de la Asociación de Concesionarios de Automóviles de Florida (FADA por sus siglas en inglés), en una entrevista con una publicación especializada en la industria.

La FADA sostiene que eliminar los concesionarios llevará a un aumento de los precios para los consumidores y a una reducción en la atención al cliente.

Protección para los concesionarios

El proyecto de ley también otorga una mayor protección a los concesionarios que buscan obtener beneficios significativos de las ventas de automóviles. Específicamente, impide que los fabricantes de automóviles establezcan precios a los que los concesionarios deben adherirse, una medida que algunos de los principales fabricantes están considerando implementar a medida que aumentan los márgenes de beneficio de los concesionarios en vehículos de alta demanda.

La ley provee una cobertura para los concesionarios ante los cambios de precio desde el fabricante. REUTERS/Nick Carey
La ley provee una cobertura para los concesionarios ante los cambios de precio desde el fabricante. REUTERS/Nick Carey

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Además, se requiere una distribución equitativa de vehículos entre los concesionarios con franquicias.

Protección para las actualizaciones

La ley también establece que los concesionarios deben recibir una compensación por las actualizaciones y activaciones de vehículos realizadas a través de actualizaciones inalámbricas. En lugar de oponerse al modelo de suscripción de vehículos, en el cual el fabricante de automóviles se beneficia de todas las actualizaciones de precios posteriores a la venta, esta ley busca proteger los intereses de los concesionarios exigiendo que se les pague por cualquier actualización o activación electrónica realizada por un cliente dentro de los dos años posteriores a la compra del vehículo.

Algunos fabricantes de automóviles y grupos comerciales de la industria se niegan a pagar a los concesionarios por servicios en los que no participan en la reventa.

Este movimiento legislativo en Florida ha sido criticado por ser anti-consumidor, ya que evita los márgenes de beneficio de los concesionarios y puede aumentar potencialmente los costos para los consumidores. En lugar de beneficiar directamente a los compradores, la ley protege a los concesionarios en un momento en que la industria está experimentando cambios significativos.

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