La tasa interanual de inflación en Estados Unidos siguió bajando en marzo, por noveno mes consecutivo, y se situó en el 5 %, un punto por debajo de la de febrero, según los datos publicados este miércoles por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, en inglés).
Sin embargo, en términos mensuales los precios de consumo subieron una décima, en un momento en el que la Reserva Federal analiza de cerca los efectos de las subidas de tipos en los precios.
En términos mensuales, por el contrario, los precios de consumo subieron en marzo una décima (frente a las cuatro décimas que subieron en febrero), en un momento en el que la Reserva Federal (Fed) analiza de cerca los efectos de las subidas de tipos en los precios.
El índice de vivienda fue el que más contribuyó al aumento mensual de los precios, con una subida de seis décimas. Interanualmente, acumula un alza del 8,2 % con respecto a marzo de 2022.
Por el contrario, los precios de la energía bajaron mensualmente el 3,5 % y, a nivel interanual, cayeron el 6,4 %.
El índice de alimentos se mantuvo sin cambios en marzo pero en términos interanuales acumula una subida del 8,5 %.
La inflación subyacente, que mide la subida de los precios de consumo menos los de los alimentos y la energía, los más volátiles, subió cuatro décimas en marzo y situó su tasa interanual en el 5,6 %.
Los datos de la inflación se conocen en un momento clave, en el que se analiza de cerca si las constantes subidas de tipos de interés llevadas a cabo por la Fed están teniendo el deseado efecto de contención de los precios.
El pasado 22 de marzo el regulador anunció la novena consecutiva, una subida de los tipos de interés de 0,25 puntos, y con ello pasaron a situarse en una horquilla de entre el 4,75 % y el 5 %
La Fed decidió ser prudente, en plena crisis bancaria causada por el colapso de dos bancos en Estados Unidos, una situación que por el momento las autoridades han logrado contener.
El regulador adelantó que “puede ser adecuado un cierto endurecimiento adicional” de su política monetaria para lograr su objetivo de inflación, aunque subrayó que seguirá vigilando las repercusiones que pueda tener.
Sin embargo, en la rueda de prensa posterior a la publicación del dato, el presidente de la Fed, Jerome Powell, anticipó que como consecuencia de la crisis bancaria los aumentos de las tasas de interés pueden no ser adecuados para contener la inflación.
Para tratar de poner coto a la subida de precios y con una inflación desbocada que llegó al 9,1% en junio de 2022, la Fed inició en marzo de 2022 las subidas con un tímido 0,25
En mayo elevó los tipos 0,5 puntos y en junio ya comenzó una racha de aumentos de 0,75 enteros, antes de bajar el ritmo a 0,50 el pasado diciembre y reducirlos aún más, a 0,25, en febrero.
La próxima reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, en inglés) del organismo tendrá lugar los próximos 1 y 2 de mayo.
(Con información de EFE)
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