El gobierno de Biden determinó formalmente el lunes que un reportero del Wall Street Journal arrestado en Rusia por cargos de espionaje fue “detenido injustamente”.
La designación eleva el caso de Evan Gershkovich en la jerarquía del gobierno de EEUU y significa que una oficina dedicada del Departamento de Estado tomará la iniciativa para asegurar su liberación.
El secretario de Estado, Antony Blinken, anunció la determinación el lunes y dijo que condenaba el arresto y la represión de los medios independientes por parte de Rusia.
“Hoy, el secretario Blinken determinó que Evan Gershkovich fue detenido injustamente por Rusia”, dijo el departamento en un comunicado. “El periodismo no es un delito. Condenamos la continua represión del Kremlin de las voces independientes en Rusia y su continua guerra contra la verdad”.
Las autoridades rusas arrestaron a Gershkovich, de 31 años, en Ekaterimburgo, la cuarta ciudad más grande de Rusia, el 29 de marzo. Es el primer corresponsal estadounidense en ser detenido por presunto espionaje desde la Guerra Fría.
El Servicio Federal de Seguridad acusó específicamente a Gershkovich de intentar obtener información clasificada sobre una fábrica de armas rusa. The Wall Street Journal ha negado las acusaciones.
El Departamento de Estado dijo que el gobierno de EEUU brindará todo el apoyo apropiado a Gershkovich y su familia y nuevamente pidió a Rusia que lo libere a él y a otro ciudadano estadounidense detenido, Paul Whelan.
La declaración del lunes de Blinken fue el primer comentario público sobre el caso desde que las agencias de noticias rusas informaron el viernes que Gershkovich había sido acusado de espionaje y lo había negado formalmente.
La agencia de noticias estatal Tass y la agencia de noticias Interfax dijeron que una fuente policial les informó que el Servicio Federal de Seguridad, conocido como FSB, había acusado oficialmente al periodista estadounidense.
Los medios de comunicación no dijeron en qué forma se acusó formalmente a Gershkovich o cuándo sucedió, pero generalmente a los sospechosos se les presenta un documento que describe las acusaciones.
En el sistema legal ruso, la presentación de cargos y una respuesta del acusado representan el inicio formal de una investigación penal, iniciando lo que podría ser un largo y secreto proceso judicial ruso.
Tass citó a su fuente diciendo: “La investigación del FSB acusó a Gershkovich de espionaje en interés de su país. Negó categóricamente todas las acusaciones y afirmó que estaba involucrado en actividades periodísticas en Rusia”.
La fuente declinó hacer más comentarios porque el caso se considera secreto.
El caso ha causado revuelo internacional y el jueves pasado, el embajador de Estados Unidos en Rusia y un alto diplomático ruso se reunieron para discutir el caso.
En la reunión con la embajadora de Estados Unidos, Lynne T. Tracy, el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Ryabkov, enfatizó “la gravedad de los cargos” contra Gershkovich, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia.
La declaración repitió las afirmaciones rusas anteriores de que el reportero “fue atrapado in fraganti mientras intentaba obtener información secreta, usando su estatus periodístico como tapadera para acciones ilegales”.
Se ordenó que Gershkovich permanezca tras las rejas durante dos meses en Rusia en espera de una investigación. Un tribunal de Moscú dijo que había recibido una apelación de la defensa de su arresto; la apelación está programada para el 18 de abril, según las agencias de noticias rusas.
(Con información de AP)
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