Linda Kasabian, una integrante de la secta dirigida por Charles Manson que asesinó a la actriz Sharon Tate en 1969, murió a los 73 años de edad, informó el martes la prensa estadounidense.
Kasabian actuó como vigilante cuando la llamada “familia Manson” asesinaba a Tate, que estaba embarazada de ocho meses y que era esposa del director de cine Roman Polanski, junto a otras tres personas en un barrio acomodado de Los Ángeles en agosto de 1969.
Durante el juicio de los miembros de la secta, Kasabian fue testigo de la fiscalía y alcanzó un acuerdo de inmunidad. Manson y cuatro de sus seguidores fueron encarcelados después del proceso.
Manson murió en detención en 2017.
El sitio de noticias TMZ reveló que Kasabian murió el 21 de enero en un hospital de Tacoma, estado de Washington, a los 73 años de edad, citando su certificado de defunción.
El certificado indicó que Kasabian había cambiado su apellido a “Chiochios” para proteger su identidad tras testificar contra el culto de Manson.
Kasabian se alejó de la “familia” la misma noche del crimen de los LaBianca, en cuya participación solo le cupo manejar un auto y esperar a los asesinos. Aterrorizada, al hacerlo abandonó a su pequeño hijo, que vivía en la comunidad formada alrededor de Charles Manson.
Luego de lograr un acuerdo de inmunidad y de declarar como testigo clave de la Fiscalía, intentó borrar sus huellas para siempre.
En 2014 se supo de ella por primera vez en años, cuando fue vista viviendo en una casa rodante, en la pobreza extrema. Tres años más tarde, el Daily Mail la halló en un modesto complejo de apartamentos en Tacoma, Washon, no lejos de la casa de su hija Quanu, de 45 años.
En una de esas oportunidades un periodista le pregunto si ella era Linda Kasabian. “No conozco a esa mujer”, respondió.
(Con información de AFP)
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