Estados Unidos expresó este jueves su preocupación por los ataques a la prensa en Panamá luego de conocerse que la víspera el ex presidente Ricardo Martinelli solicitó a la Justicia el emabrgo de los bienes del medio digital Foco.
“Vemos con preocupación los ataques contra los medios de comunicación en Panamá, parte de una alarmante tendencia. Cuando se usa la ley para intimidar a los medios se priva al ciudadano de su derecho a estar informado”, alertó en Twitter la emabajada estadounidense en el país.
Si bien el mensaje no hace refrencia directa a este hecho, el anuncio se sumó a la decisión de Estados Unidos de enero por medio de la cual se le prohibió la entrada al país tanto a él como a sus familiares cercanos por “actos de corrupción significativos”.
La acusación del ex mandatario pesa no sólo sobre el medio sino, también, sobre las personas allegadas a él, a quienes se acusa de “calumnias, daños y perjuicios”, según la denuncia. Inclusive, la ley panameña permite que la Justicia avance con la cautelación de bienes previo a la presentación de una demanda y sin sentencia judicial.
De todas formas, hasta el momento, los abogados de Martinelli no han conseguido avanzar en gran medida con ellos, por lo que sólo han embargado bienes del antiguo domicilio del director -residencia de sus hijos-.
“Esto simplemente es una manera más de amedrentar. Martinelli busca que no se informe los señalamientos de corrupción que han hecho contra él”, declaró a la agencia de noticias AFP Mauricio Valenzuela, director de Foco.
“Nosotros tenemos más de 30 querellas penales interpuestas por Martinelli y personas allegadas a él, y todas se las ha ido cerrando el ministerio público por ausencia de delito”, comentó por su parte a la agencia Anette Planells, cofundadora del medio digital y miembro del Movimiento Independiente (Movin). “Esto es, evidentemente, una persecución, el uso del sistema judicial para amedrentar. Pero nosotros no vamos a parar de seguir denunciando la corrupción”, agregó.
Por su parte, el ex mandatario fue defendido por su vocero, Luis Eduardo Camacho, quien dijo que “se acabó el relajo. Él (Ricardo Martinelli) no va a permitir que se esté jugando con su nombre y el de su familia”.
Esta no es la primera vez que Martinelli está envuelto en un escándalo legal. El ex mandatario y dos de sus hijos, Ricardo Alberto y Luis Enrique, están siendo investigados por el presunto blanqueo de capitales tras cobrar sobornos a la empresa brasileña Odebrecht, junto con otras denuncias por corrupción.
En tanto, sus hijos se declararon culpables de haber recibido USD 28 millones en comisiones, por lo que cumplieron una condena en Estados Unidos. Su defensa apuntó contra el ex presidente, a quien acusó de inducirlos a cometer los delitos. En enero fueron excarcelados y devueltos a su país.
La SIP condenó los ataques a la prensa
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) ya había denunciado en octubre, durante la 78 Asamblea General, que el acoso judicial y las demandas millonarias que se imponían a medios y periodistas, sumadas a las medidas discrecionales del Gobierno, se han convertido en la principal amenaza a la libertad de prensa en Panamá.
Inclsuive, en aquella oportunidad, la SIP citó el caso de Foco, que sufrió una querella permanente por calumnias e injurias desde 2019, con más de 26 episodios.
Si bien la mayoría de los expedientes contra el medio fueron archivados de manera provisional o definitiva, la fiscalía aún mantiene abiertos seis de ellos que suman 510.000 dólares en demandas.
En tanto, el organismo comentó que la Corporación La Prensa (Corprensa) enfrenta 12 demandas civiles por presuntos daños y perjuicios por calumnia e injuria, que suman un total de USD 44.574.000.
En este contexto, manifestaron “la necesidad de eliminar el delito penal de calumnia e injuria y establecer límites a los montos que se reclaman en demandas civiles, vetar el secuestro de activos y que se pueda solicitar la caducidad de la demanda tras un período en que el caso no tenga avance en los tribunales”.
(Con información de AFP y EFE)
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