La historia de los juegos de shooter tuvo un punto de inflexión en 1999, cuando arribaron al mercado Quake III Arena de id Software y Unreal Tournmanet de Epic Games. Ambos juegos compitieron fervientemente por liderar el segmento, el cual en su momento apuntaba de lleno a la competición online. Sin dudas, ambos títulos están presentes en los recuerdos de muchos jugadores y en el desarrollo de muchos juegos de hoy en día que tienen componentes de estos clásicos, como puede ser la utilización del motor unreal.
Pese a que cuando llegaron al mercado pelearon duramente por las ventas, ambos títulos marcaron distintos items que reforzaron el género del shooter a lo largo del tiempo. Por el lado del juego realizado por id Software, Quake III Arena, se puede destacar que fue un obra atemporal donde se apostó de lleno por una experiencia frenética y dinámica. Este videojuego tenía como particularidad la ausencia de un modo historia, algo bastante irruptivo para la época. Sin embargo, contaba con una modalidad en solitario que consistía en un combate dentro de una arena contra bots, algo muy común en la época. El desarrollo de Q3 pasó por el modo multijugador online, el nicho de los FPS al terminar la década de los años noventa que permitía llegar al éxito.
La premisa de Q3:A pasa por atravesar el campo de batalla eliminando a los enemigos y sumando puntos a medida que se iba logrando los objetivos del juego. Esto último puede determinar el fin de la partida, al igual que cuando se acaba el tiempo. Los modos que incluye el juego son Deathmatch, el típico a muerte, el cual también cuenta con una versión cooperativa; Capture the Flag, que tiene como objetivo encontrar la bandera en territorio rival y Tournament, en el que los jugadores realizan batallas 1vs1 en una ronda de eliminación. Por otra parte, el diseño del juego incorporó un estilo minimalista en su interfaz, algo que lo destacó de sus competidores.
En el año 2000 Q3 llegó a Sega Dreamcast con una gran promoción detrás. La versión para consolas incorporó un suporte para juego online que permitía a 4 jugadores jugar contra otros de PC. El paso de computadora a una plataforma hogareña nunca fue ni será una tarea fácil, por eso se recuerda el traslado de este Quake III como uno de los mejores, dado que aterrizó con un juego fluido que funcionaba muy bien en su modo online. En 2001 llegó a PlayStation con Quake III Revolution, título que cuidaba muchos elementos de Arena. Este no tuvo éxito, ya que no posibilitaba jugar online, la pieza fundamental del título.
El juego desarrollado por Epic Games, Unreal Tournment, llegó como la secuela de la saga Unreal, título que había pisado fuerte en el mercado. Al igual que Quake 3, Unreal proponía un modo multijugador online y local, algo obligado para poder tener espacio en el mercado. El videojuego disponía de expansiones gratuitas, las cuales se relanzaron en Unreal Tournmanet: Game of the Year Edition. La saga tomó vida propia, pese a que se planeó como una expansión del primer unreal, el juego originó secuelas independientes como Unreal Tournament 3, que llegó en 2007 para PC, PlayStation 4 y Xbox 360.
Una de las características más relevantes que trajo UT fue el desarrollo de su inteligencia artificial. Esta se reflejaba muy bien en la experiencia de jugador, el cual podía elegir varios niveles de dificultad utilizados por los bots tanto en modo solitario como multijugador. Sin embargo, la novedad pasaba por la dificultad automática, la cual se activaba y permitía medir la capacidad de IA del jugador. Algo normal en los juegos de hoy en día, pero todo un avance para 1999.
Cabe destacar que este juego marcó el futuro de muchos, ya que se convirtió en el motor de juego abierto más utilizado por la industria en los últimos años. La primer versión de este integraba un trabajo de renderizado, detección de colisiones, visibilidad, configuración para redes y la inteligencia artificial anteriormente nombrada. Su versión para PlayStation y Sega Dreamcast no cumplió las expectativas y no generó un nivel propicio de ventas.
Pese a que ambos juegos tuvieron una propuesta similar, centrada en el multijugador tanto local como online, marcaron de distinta manera la historia de los shooters. La división de los públicos provocó el origen de las competencias y torneos profesionales, algo que marcaría el futuro de los FPS. En la actualidad, ambas franquicias mantienen un futuro nublado. En el caso de la saga de id Software, tuvo un último paso con Quake Champions en 2018. Este free-to-play no logró el éxito de sus predecesores, algo que complica alguna nueva edición. Por el lado del juego de Epic Games es todo un poco más complicado aún, ya que la desarrolladora tiene todos sus ojos puestos en el sistema Battle Royale, con su exitoso Fortnite a la cabeza.