Mucho se ha hablado en el último tiempo sobre las dos últimas generaciones – y muy de moda -. La generación millennial está compuesta por personas que nacieron entre 1980 y 1995, esto quiere decir que tienen entre 37 y 21 años. Por su parte, la generación centennial, a diferencia de los primeros, se compone de personas nacidas a partir de 1997. Algunos autores hasta consideran que son las personas nacidas a partir del año 2000 en adelante, aunque como en todas las épocas, no existe un consenso sobre el año exacto en que se produce la brecha entre una generación y otra.
¿En qué se diferencian?
A pesar de que se llevan pocos años de edad, los millennials (generación Z) y centennials (generación Y) tienen diferencias sustanciales. Una de ellas, es la brecha tecnológica evidente. Aunque ambos son nativos digitales, la generación Z conoció un mundo sin tecnología avanzada, mientras que la generación Y, no ha conocido vida sin redes sociales ni Internet, eso cambia sus hábitos y comportamientos, principalmente en el consumo. Es por eso, que estos "futuros adultos" son motivo de estudio permanente.
Según un estudio realizado por ManPower en 2016, los millennials y centennials representarán en 2020 el 35% y 24% de la fuerza laboral del mundo.
El hecho de que los centennials hayan nacido con una tablet bajo el brazo, genera nuevas concepciones de ver el mundo. La inmediatez y la accesibilidad a la información, al igual que una era digital jamás vista son pilares de este siglo. Es por eso que se considera una de las generaciones más tolerantes, especialmente en relación con temas de sexualidad, igualdad de género y derechos de las minorías.
Los millennials por su parte, disfrutaron de los primeros años de la libertad y privacidad en Internet, a diferencia de los centennials que vinieron al mundo cuando este ya estaba implantado en la sociedad, cambiando drásticamente los conceptos de público y privado.
Otra de la característica de los nuevos hijos de la tecnología moderna es la capacidad de estar en permanente contacto con otras culturas gracias a la conectividad y a las nuevas facilidades a la hora de planificar viajar. Gracias a las redes sociales y la globalización, las fronteras entre países se achican y la capacidad de relacionarse con personas de otros países es más fácil que en el pasado.
El futuro del consumo de la mano de los millennials y centennials
Las marcas le dan importancia a la segmentación de su público y la eficacia de los mensajes a la hora de comunicar. En la actualidad, las marcas se tuvieron que acomodar a estos dos nuevos actores sociales, sus canales y comunicación y su lenguaje, marcando la impronta de la actual comunicación digital.
Así es como, un informe publicado por Bank of America Merrill Lynch, titulado "New Kids On The Block. Millennials & Centennials Primer", explica como estas dos generaciones entienden las finanzas, el consumo y la tecnología, entre otras cosas. Alguno de los datos que se dan a conocer son que el 88% viven en mercados emergentes, el 90% posee un smartphone y durante 2025 controlarán el 47% de los fondos del planeta. A su vez, Representan el 27% y el 32 % respectivamente de la población mundial, estimada a día de hoy en 7.400 millones.
Ante esta predicción y los respectivos comportamientos, las empresas se amoldan a este nuevo paradigma y estas dos generaciones se constituyen como un importante nicho de mercado y dejará de centrarse en generalidades propias de los consumidores medios.
¿Menos concentrados o más capaces?
Por otro lado, una investigación realizada por la Maestría en Educación de la Universidad Sergio Arboleda, ubicada en Colombia, dio a conocer que el millennial tiene una estructura que le permite tener una atención de hasta 15 minutos sobre un mismo tema en contextos educativos. A diferencia de los centennials, que no logran atender mucho tiempo en contextos educativos, dado que las redes y ambientes digitales les presentan un cúmulo de información simultánea que reduce considerablemente su atención, pero que también aumenta su capacidad de multitasking.
Los resultados preliminares para la atención máxima en el caso de la generación Y, oscilan entre uno o dos minutos. Así, para que el mercado impacte a este tipo de consumidores debe superar las lógicas dirigidas al consumidor medio y al millennial, para reinventarse de cara a un nuevo consumidor que no da la posibilidad de esperar a lo que podrá pasar.
Estos nativos digitales están dando sus primeros pasos en el mercado laboral y presentan un nuevo desafíos y oportunidades para las empresas, que deberán encontrar maneras de aprovechar y beneficiarse de las capacidades únicas de los miembros de estas generaciones.