En el contexto actual, con los padres más presentes en el hogar al mismo tiempo que las madres pasan más tiempo fuera de casa, la educación de los hijos -a diferencia de lo que ocurría en generaciones anteriores- pasa a ser una tarea compartida. Infobae consultó a padres y expertos en educación acerca de este cambio de paradigma y sus alcances.
¿Están realmente más involucrados? ¿Cuánto? ¿En qué aspectos?
"En líneas generales el papá se involucra mucho más en la educación de los hijos, en los diferentes estratos socioculturales. Actualmente se nota una presencia mayor en las entrevistas, en las reuniones de padres, se hace mucho más presente en el vínculo y la comunicación con la escuela que hace unos años atrás, la comunicación era un patrimonio casi exclusivo de la madre", dijo Gabriela Fernández, Directora de Nivel Inicial en jardín de infantes Virgen de la Pureza.
"Antes por lo general venía la mamá sola, incluso delegaban en ella la elección del jardín. Ahora el papá pide permiso en el trabajo para poder participar de la adaptación de los nenes, se turnan un día o una semana cada uno y ése creo que es el cambio más significativo de todos: antes el hombre no relegaba su trabajo", destacó Gabriela Viegas Cabrilha, Directora del jardín maternal Casablanca.
"Estamos infinitamente más involucrados que nuestros abuelos y bastante más involucrados que nuestros padres, al menos en general. De todas formas a veces se exagera ese rasgo de época. Hay padres que participan, que se interesan por lo que están viendo en clase sus hijos, o lo que les dan de comer en el comedor, pero sigue siendo un territorio mayoritariamente femenino. Al menos en el caso de la Irlanda, la cooperadora se la cargan las madres, son las que más presentes están, las que más trabajan, y en las reuniones de padres el 80% son mujeres, mínimo", señaló Pablo, padre de tres alumnas de la escuela Irlanda, la número 9 del D.E. 16.
¿Cuáles son las tareas que corren por cuenta del papá?
"Participo siendo miembro de la cooperadora del colegio. Obviamente noto una enorme diferencia con respecto a mi historia: mis padres iban colegio una o dos veces al año. Ambos aportamos a la capacitación de nuestro hijo a nivel general, pero cada uno se destaca en ciertas áreas y aprovechamos eso. Para resumir, yo soy más de ciencias exactas y mi mujer, más de ciencias sociales", dijo Marcos, papá de un alumno de la E. N. S. N' 2 "Mariano Acosta".
"Soy parte de la cooperadora y voy a todas las reuniones que puedo. Voy también a los actos y formo parte del equipo de padres que organiza en la escuela los torneos municipales de ajedrez, así que esos días (los dos sábados al año que nos toca) trabajamos bastante porque la recaudación de lo que se consume nos suma mucho para las necesidades de la escuela. Me involucro cuando las chicas tienen que hacer algo que requiere búsquedas en internet, o cuando son actividades de redacción. También en algunos trabajos relacionados al dibujo, pero en general mi mujer es la que se sienta con las nenas y la que tiene más paciencia para explicarles la diferencia entre divisor y dividendo, o las partes del análisis sintáctico", comentó Pablo, padre de tres alumnas de la escuela Irlanda, la número 9 del D.E. 16.
¿Qué pasa con las expectativas de los padres sobre los hijos hoy?
"Por un lado se atiende mucho más las preferencias de los chicos, pero en general el padre siempre trata de fomentar lo que más ama: los que son profesores o intelectuales los llenan de libros, los más deportistas les estimulan la práctica del deporte. Esa tendencia (a que sigan los pasos de uno) persiste, a veces más consciente y otras más inconscientemente", opinó Mónica Pini, Doctora en educación, UNSAM.
¿Hace la diferencia la presencia del papá? ¿En qué aspectos?
"Totalmente. En cuanto a la adaptación por ejemplo, el padre es más sencillo que la mamá. Se hace más fácil y llevadera cuando la hacen los dos, porque en la mayoría de los casos al papá le cuesta menos desprenderse. Para los chicos en general está más claro que el papá se va a trabajar y vuelve, es más natural ese despegue. Con mamá es siempre un tira y afloje, un besito, los chicos siempre piden algo más y tienden a tratar de estirar el momento de la despedida. El papá tiene otra forma de ver las cosas, su acompañamiento hace que la mamá esté más tranquila, porque le da su opinión y también la hace pensar desde los dos ángulos", indicó Gabriela Viegas Cabrilha, Directora del jardín maternal Casablanca.
"Cuando los educadores sabemos que en un hogar hay una mamá y un papá, insistimos mucho en invitar a que ambos participen, sobre todo cuando hay algún punto en desacuerdo. En general aceptan la invitación a acercarse al colegio, el papá hace el esfuerzo de acompañar a la mamá. Quedan algunas excepciones todavía, algunos papás todavía la mandan a la mamá sobre todo cuando es ama de casa, pero la verdad que son los menos", destacó Gabriela Fernández, Licenciada en Nivel Inicial y Directora de Nivel Inicial en Jardín Virgen de la Pureza.
¿Qué buscan hoy los padres en una institución educativa?
"Mi elección de la escuela se basó en tres parámetros: la calidad de la educación, el concepto de comunidad dentro de la escuela y que fuera jornada simple", opinó Marcos, papá de un alumno de la E. N. S. N' 2 "Mariano Acosta".
"Lo que se prioriza surge de acuerdos básicos del hogar. Se mira mucho lo económico, los horarios, la calidad educativa dentro de las posibilidades de ese hogar, y al tener que salir a trabajar la mamá también buscan asistencia y contención. En esto la escuela de gestión privada de índole parroquial o que no tenga cuota tan cara juega un rol muy importante, porque la escuela de gestión estatal no siempre les garantiza la continuidad que necesitan al trabajar ambos papás", dijo Gabriela Fernández, Directora de Nivel Inicial en jardín de infantes Virgen de la Pureza.
"(Con mi pareja) Priorizamos que fuera una escuela pública en el barrio, que el edificio estuviera en condiciones, que tuviera una conducción docente que nos inspirara confianza y una cooperadora activa. Por suerte obtuvimos las vacantes", opinó Pablo, padre de tres alumnas de la escuela Irlanda, la número 9 del D.E. 16.