Las Chorreras del Cabriel es un paraje natural formado por el río Cabriel entre Enguídanos y Villora
Cuenca está repleto de rincones con encanto. Aunque, a menudo, los pueblos que conforman esta provincia de Castilla-La Mancha pasan desapercibidos por formar parte de la famosa España vaciada, lo cierto es que son muchas las joyas que esconde. Precisamente, una de sus localidades más bonitas y desconocidas es Huete, que no solo destaca por ser un lugar ideal para pasar un fin de semana de desconexión, sino también por la belleza natural y cultural que aglutina. Esto no es de extrañar si se tiene en cuenta que es un remanso de paz, de arquitectura medieval, que tiene como principal atractivo los restos de un castillo del siglo IX.
Conocida por sus paisajes pintorescos y tradiciones profundamente enraizadas, Cuenca alberga en sus pueblos auténticas joyas por descubrir. Desde los imponentes acantilados de la Serranía o los vastos valles verdes que se extienden hasta el horizonte, cada rincón de esta provincia ofrece una experiencia única. Las villas, con su arquitectura medieval y calles empedradas, parecen transportar al visitante a épocas pasadas, llenas de historia y encanto. A ello se suma la hospitalidad de su gente y la riqueza de su gastronomía, que hacen de la visita una experiencia aún más memorable.
La provincia de Cuenca es un destino que sorprende a cada paso, con pueblos medievales llenos de encanto y paisajes naturales impresionantes que invitan a ser explorados. Es por ello que, quienes estén planeando una escapada, pueden visitar algunos de los pueblos más bonitos de la región, como la calma de Huete, la majestuosidad de Belmonte y la naturaleza intacta de Beteta.
Huete es un precioso pueblo de Cuenca. (AdobeStock)Huete, con su ambiente tranquilo y su bien conservada arquitectura medieval, se presenta como el destino ideal para quienes desean escapar del bullicio urbano y sumergirse en un entorno de paz y serenidad. Entre sus principales atractivos se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora de Atienza y la Iglesia de Santo Domingo de Guzmán, un verdadero tesoro arquitectónico que cautiva tanto por su belleza como por su rica historia.
Además, el puente romano que cruza el río Mayor es otra de las joyas de este municipio, ofreciendo a los visitantes una experiencia que los transporta al pasado y permite apreciar la grandeza de una tierra cargada de tradiciones.
Ubicado en la comarca de la Alcarria, en la provincia de Cuenca, Huete destaca por su rica historia como ciudad castellana. Su castillo y murallas formaban parte de un sistema defensivo que se extendía desde la orilla izquierda del Tajo hasta la serranía y la Mancha conquense. El municipio tiene una gran cantidad de palacios y casonas señoriales, entre los que sobresale el Monasterio de Santa María de la Merced, que alberga el Museo de Arte Contemporáneo de Florencio de la Fuente.
Restos del castillo de Huete, en Cuenca. (Alcarria Conquense)La oportunidad de explorar en Huete un castillo musulmán de tipo alcazaba, construido en el siglo IX, permite adentrarse en la historia de una fortaleza estratégica que aprovechó la extensión del cerro en el que se asienta. Su diseño ofrecía un amplio espacio interior, capaz de albergar una numerosa guarnición. La muralla del castillo contaba con 16 torres, y de él partía otra muralla con cinco torres que rodeaba la ciudad. Las restauraciones realizadas han permitido la conservación de uno de sus torreones, además de silos, aljibes y canalizaciones de agua en su interior.
La llegada de los bereberes a Huete en el siglo IX estableció un sistema defensivo conocido como la Kura de Santaver, que formaba parte del reino taifa de Sevilla. Aunque Alfonso VI conquistó el castillo en 1080, la presencia musulmana en la región se mantuvo hasta el siglo XII. La tradición local relata que en 1150, durante el asedio de la ciudad por parte de los musulmanes, una tormenta inesperada llenó de agua los aljibes secos del castillo, lo que permitió a los defensores resistir hasta la llegada de los refuerzos cristianos, evitando así la rendición del pueblo.
Iglesia de Santo Domingo de Guzmán en Huete, Cuenca. (AdobeStock)Para llegar a Huete se pueden seguir diferentes rutas dependiendo del medio de transporte elegido. En coche, desde Cuenca, está a unos 35 km. Se puede tomar la N-320 en dirección a Tarancón y luego la CM-2102 que conecta con el pueblo. El trayecto dura aproximadamente 40 minutos.
Existen rutas de autobús desde Cuenca y Madrid hacia Huete. A su vez, la estación de tren más cercana es la de Tarancón, a unos 30 km de distancia. Desde allí, se puede tomar un autobús o taxi. Para llegar a Tarancón, se puede tomar un tren de media distancia desde Madrid.