Calles medievales, un castillo del siglo XIII y un viaje al pasado: el mejor pueblo para visitar en diciembre según el National Geographic

Esta villa se encuentra muy cerca de Madrid y destaca por su patrimonio histórico y su conjunto monumental

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Calles medievales, un castillo del siglo XIII y un viaje al pasado: el mejor pueblo para visitar en diciembre según el National Geographic.

A lo largo de la península ibérica, existen pueblos que sorprenden por su historia y tradición. Uno de los más destacados es Pedraza, una villa medieval ubicada en la provincia de Segovia que, con sus calles empedradas y monumentos bien conservados, se ha convertido en uno de los destinos más emblemáticos de la región. Declarada Conjunto Monumental en 1951, esta localidad ofrece una experiencia única que transporta a sus visitantes a otra época. Tanto es así, que en su selección mensual, el National Geographic ha elegido a Pedraza como el mejor pueblo para visitar en diciembre.

De este modo, sus orígenes no se saben a ciencia cierta, pero, existen indicios de presencia humana prehistórica en los valles del río Cega. Según informaciones de Turismo de Segovia, se han hallado restos de cerámica hecha a mano cerca de la explanada del castillo, que datan del siglo IV a. C. Además, dentro del término municipal se encuentra la Cueva de la Griega, un enclave destacado del paleolítico en la meseta castellana gracias a sus grabados rupestres, considerados uno de los “santuarios” prehistóricos más relevantes.

Un castillo del siglo XIII

Castillo de Pedraza, en Segovia (Shutterstock).
Castillo de Pedraza, en Segovia (Shutterstock).

La visita a Pedraza no tiene ningún tipo de pérdida, pues el único punto de entrada y salida se encuentra en la conocida como Puerta de la Villa. Este arco data del siglo XI y descubre un casco antiguo que parece parar el tiempo. En él, sus calles medievales y empedradas hacen viajar al visitante a la Edad Media, desvelando un patrimonio histórico y monumental único en la región que se vertebra en torno a la Calle Real, la arteria principal que conecta la Plaza Mayor con el castillo.

La fortaleza es uno de los principales monumentos de la villa y data del siglo XIII, aunque fue reconstruida en el siglo XV. En 1926, fue adquirido por el pintor Ignacio Zuloaga, quien restauró una de las torres y la utilizó como taller. Actualmente, el castillo alberga el Museo Zuloaga, un espacio dedicado a la obra del artista, habilitado por sus descendientes. Sin embargo, recientemente se puso a la venta y ha sido comprada por los humoristas Santiago Segura y José Mota.

En cuanto a su arquitectura, el castillo de Pedraza es un ejemplo destacado de la arquitectura militar medieval en España. La estructura se caracteriza por sus robustas murallas de piedra, sobre las que destaca su impresionante torre del homenaje. Igualmente, en su interior se pueden apreciar varios espacios como el patio de armas, el patio principal o el patio Misa de Campaña.

Un rico patrimonio medieval y natural

Pedraza, en Segovia (Shutterstock).
Pedraza, en Segovia (Shutterstock).

Más allá del castillo, Pedraza destaca por una sobria arquitectura que destaca por sus casas blasonadas, entre las que sobresale la Casa de Pilatos, un edificio del siglo XVI que perteneciera a la familia Ladrón de Guevara. La Plaza Mayor, uno de los rincones más fotografiados de Segovia, presenta una estructura irregular que refleja la evolución de la villa a lo largo del tiempo. Rodeada de casas porticadas y presidida por la iglesia de San Juan Bautista, la plaza combina elementos románicos y barrocos. La torre con arquería y el ábside románico del templo se mantienen como vestigios de su construcción original.

Otro punto clave en Pedraza es la Cárcel de la Villa, un edificio medieval del siglo XIII, reconstruido en el siglo XVI. Abierta al público desde 1994, permite conocer cómo funcionaban las mazmorras durante la Edad Media y ver de cerca grilletes y celdas originales. Pero esto no es todo, pues el entorno natural que rodea la villa es perfecto para los amantes de la naturaleza y el turismo activo. La villa está rodeada por los paisajes de la Sierra de Guadarrama y el valle del río Cega, donde se pueden realizar rutas de senderismo y actividades al aire libre.

Los bosques de encinas y robles que caracterizan la zona son el hábitat de una rica fauna, como ciervos, jabalíes y aves rapaces, que añaden un encanto especial a la experiencia. En las inmediaciones, los visitantes también pueden disfrutar de parajes naturales como las hoces del río Duratón, un espacio protegido conocido por sus cañones de roca caliza y la presencia de buitres leonados. La tranquilidad del entorno y sus vistas panorámicas convierten a Pedraza y sus alrededores en un destino ideal para desconectar y disfrutar del patrimonio natural de Segovia.

Cómo llegar

Pedraza se encuentra a 38 kilómetros de la ciudad de Segovia. El trayecto en coche tiene una duración aproximada de 40 minutos a través de la carretera de Soria-Plasencia, siguiendo por la N-110 y la SG-P-2322. Desde Madrid, el viaje dura alrededor de 1 hora y 30 minutos por la vía A-1, dependiendo del tráfico.

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