La Navidad es sinónimo de magia, luces y tradiciones, y en Europa, pocos eventos capturan mejor este espíritu que los mercadillos navideños. Desde noviembre hasta enero, ciudades de todo el continente se transforman en escenarios de cuentos de hadas, con plazas y calles adornadas por miles de luces, aromas de dulces y vino caliente, y puestos que ofrecen productos artesanales únicos. Este año, destacamos algunos de los mercados más emblemáticos y encantadores para planificar una escapada inolvidable. Es por ello, que desde Civitatis, han elaborado una selección de 10 mercadillos imprescindibles para una escapada esta Navidad.
Budapest, Hungría
La Plaza de la Basílica de San Esteban en Budapest se convierte en un espectáculo navideño que fascina a locales y turistas. Un imponente árbol de Navidad preside este mercado, rodeado de puestos que ofrecen desde artesanías hasta gastronomía típica húngara, como lángos y goulash. Este mercado destaca por la calidad de sus productos, lo que lo posiciona entre los mejores de Europa.
Viena, Austria
El mercado de la Plaza del Ayuntamiento de Viena es un clásico navideño que combina tradición y magia. Con sus talleres, puestos de productos locales y delicias como el glühwein (vino caliente especiado), este mercado es un imprescindible para quienes buscan vivir una Navidad vienesa auténtica. Las decoraciones y las luces transforman el centro de la ciudad en un lugar de ensueño.
Madeira, Portugal
En el corazón del Atlántico, Madeira alberga uno de los mercadillos más especiales de Europa. Según European Best Destinations, es el mercado más luminoso del continente. Aquí, la tradición se mezcla con la creatividad: los puestos ofrecen flores exóticas, artesanía local y gastronomía isleña. Las actuaciones folclóricas y los cantos tradicionales añaden un encanto único.
Poznan, Polonia
La Plaza del Mercado Viejo de Poznan se transforma en un paraíso navideño, pero el verdadero espectáculo tiene lugar durante el Festival de Esculturas de Hielo. Estas impresionantes obras efímeras, junto con la noria en la Plaza de la Libertad, crean un ambiente mágico. Los visitantes pueden disfrutar de gastronomía polaca como pierogi y obwarzanek mientras pasean entre las casetas.
Colmar, Francia
El casco antiguo de Colmar, con sus casas de entramado de madera, se ilumina con miles de luces y decoraciones. Este pueblo medieval se convierte en un escenario navideño que parece sacado de una película. Los mercados, villancicos y actividades culturales hacen de Colmar un destino imprescindible para los amantes de la Navidad.
Tallin, Estonia
El mercadillo de Tallin, celebrado en el casco antiguo, es una experiencia única. Su árbol de Navidad de 15 metros, rodeado de puestos que ofrecen dulces locales y vino caliente, crea una atmósfera inigualable. Este mercado, reconocido en 2019 como el más bonito de Europa, sigue siendo un referente del espíritu navideño.
Dresde, Alemania
Alemania es la cuna de los mercadillos navideños, y el Striezelmarkt de Dresde, celebrado en la plaza Altmarkt, es uno de los más antiguos del continente. Desde representaciones teatrales hasta exposiciones de artesanía, este mercado es un viaje en el tiempo que permite experimentar una Navidad auténticamente alemana.
Basilea, Suiza
Las plazas de Barfüsserplatz y Münsterplatz en Basilea se iluminan con guirnaldas y decoraciones navideñas. Este mercado, galardonado como el mejor de Europa en varias ocasiones, combina la artesanía suiza con delicias como el Basler Läckerli. Sus actividades para toda la familia y conciertos lo convierten en un destino destacado.
Bruselas (Bélgica)
La capital belga ofrece uno de los mercadillos más completos de Europa. En su Plaza Mayor, un árbol de Navidad majestuoso, iluminaciones y puestos de comida local crean un ambiente mágico. Gofres, chocolate y pistas de patinaje son algunos de los atractivos de este destino festivo.
Mánchester (Reino Unido)
En Albert Square, frente al imponente Ayuntamiento neogótico de Mánchester, se encuentra uno de los mercadillos navideños más destacados del Reino Unido. Cientos de puestos de madera ofrecen productos artesanales, delicias gastronómicas y bebidas festivas. La mezcla de tradición y modernidad convierte este mercado en un plan perfecto para quienes buscan vivir una Navidad vibrante en el corazón de Inglaterra.