En pocas ocasiones prestamos atención a las ciudades costeras de Reino Unido y si lo hiciéramos un poco más, descubriríamos las grandes joyas que alberga el país, como Lowestoft. Esta villa está ubicada en Suffolk, al sur de Great Yarmouth, el punto más oriental del país, conocida por el ser el primer lugar que ve el amanecer a diario. Este destino cuenta con una rica historia pesquera y con los años, se ha transformado en un centro turístico que atrae a miles de visitantes cada año. Sus playas doradas, jardines costeros y las múltiples actividades que ofrece, convierten a esta villa en el lugar ideal para disfrutar del mar y la naturaleza.
Son esas playas tan especiales, su mayor atractivo turístico. Tiene dos principales, ambas muy bien cuidadas y con una amplia gama de actividades que realizar. En ellas se puede disfrutar bajo el sol, dar largos paseos con la compañía de la brisa marina o jugar al golf loco. Además, los jardines costeros y las vistas desde el muelle sur con idóneos para capturar el ocaso en su plenitud.
Una caminata más larga, nos llevará hasta los Kensington Gardens, ubicados cerca de los arenales, ofrecen una oportunidad perfecta para disfrutar de un entorno natural mientras se sigue escuchando el rugir de las olas. Esa mezcla de playa y naturaleza hace que Lowestoft sea un buen destino de vacaciones para las personas que no se deciden entre mar y montaña -y si quieran ahorrar alguna discusión familiar-. Además, permite conocer la cultura británica más de cerca y alejada de los bulliciosos Londres o Liverpool.
Un viaje a través de la historia
Esta ciudad cuenta con una rica oferta cultural y museística. En días menos soleados, donde la brisa y las temperaturas algo más bajas no permitan estar en la playa, los visitantes pueden explorar los diversos museos de la villa, como el Lowestoft War Museum, el East Suffolk Maritime Museum y el East Anglia Transport Museum, este último con una impresionante colección de tranvías operativos y transporte público histórico.
Otro punto imprescindible es Ness Point, el punto más oriental de Reino Unido. Desde aquí una plataforma de orientación, apodada el Euroscopio, que muestra la distancia y la dirección de numerosos lugares en todo el Reino Unido y en el mundo, como París. Incluso señala la dirección del amanecer del solsticio de invierno.
Gastronomía y vida local
El East Point Pavilion ofrece un espacio donde poder probar una excelente comida o tomar algo con unas vistas sin igual al mar. Este pabellón victoriano, renovado con un diseño moderno de cristal, también acoge eventos como proyecciones de películas, mercados locales y sesiones de yoga.
No se puede hablar de Lowestoft sin mencionar a uno de sus hijos más ilustres, el compositor Benjamin Britten. Nacido en esta ciudad costera, su casa de la infancia en Kirkley Cliff Road sigue siendo un lugar de interés cultural que los visitantes pueden explorar.
En definitiva, Lowestoft es un destino costero que combina historia, cultura y entretenimiento en un entorno natural espectacular. Ya sea para disfrutar de un día en la playa, explorar su rica historia o experimentar su vibrante vida local, esta ciudad ofrece algo único para cada tipo de viajero.