El pueblo de los Pirineos que es uno de los más bonitos de Cataluña

Localizado en pleno Pirineo, el municipio catalán de Bagà se presenta como uno de los enclaves más atractivos de la provincia de Barcelona. Con un entorno natural privilegiado, a los pies del Parque Natural del Cadí-Moixeró, Bagà destaca por su patrimonio medieval y su rica historia vinculada a los barones de Pinós.

Así, viajar a esta localidad catalana implica iniciar un viaje a través del tiempo. El municipio, cuya historia empieza en el año 1233, ofrece un recorrido a través de su legado histórico, reflejado en monumentos medievales y calles empedradas, todo enmarcado por un imponente entorno natural

Con la estética propia de las localidades de montaña, la vida en este pequeño pueblo gira en torno a una Plaza Mayor porticada de estilo medieval, donde se encuentran la iglesia gótica de Sant Esteve, del siglo XIV, el Palacio de los Pinós y una estatua de Galcerán de Pinós, almirante catalán y fundador del municipio.

Fuera del centro, destaca el entorno del río Bastareny, especialmente el puente medieval que lo cruza y que alberga un oratorio del siglo XVI con una imagen de la Virgen. En ese mismo lugar se encuentra el Parque de la Villa, un espacio ideal para pasear y disfrutar de un momento de descanso, con vistas a los tejados de Bagà al frente. Entre los puntos de este municipio también se incluyen la iglesia románica de Sant Joan del Avellanet, el Museo Cátaro y Medieval, que ilustra la Ruta de los Hombres Buenos y el Santuario de Paller, dedicado a la Virgen de Paller, patrona de Bagà, y ubicado a unos dos kilómetros del centro.

El Parque Natural del Cadí-Moixeró es uno de los entornos naturales más emblemáticos de Cataluña. Es por ello, que el municipio de Bagà se presenta como un destino ideal para los amantes del senderismo. Entre las rutas más destacadas se encuentra el Camí dels Bons Homes, un antiguo sendero utilizado por los cátaros en su huida hacia Cataluña, que atraviesa parajes históricos y naturales.

Otra opción popular es la ascensión al Pedraforca, una de las montañas más icónicas de los Pirineos catalanes, cuyo acceso desde Bagà ofrece una experiencia desafiante para excursionistas experimentados. Además, hay rutas más accesibles, como el recorrido hasta el Santuario de Paller, ideal para quienes buscan una caminata tranquila por el entorno rural.

Para llegar a Bagà desde Barcelona en coche, el recorrido comienza tomando la C-31 o la C-33 en dirección a la C-58, con destino a Manresa o Sabadell. Una vez en la C-58, se debe continuar por esta autopista hasta enlazar con la C-16, que lleva hacia Berga y el Túnel del Cadí.

Ya en la C-16, habrá que continuar en dirección norte, pasando por localidades como Manresa, Berga y Gironella. Finalmente, al aproximarse a Bagà, se debe seguir las indicaciones hacia este municipio, situado a unos 100 kilómetros de Barcelona. El trayecto tendrá una duración aproximada de 1 hora y 30 minutos.