En qué casos te devuelven el dinero si pierdes un avión

Las maletas, la hora de llegada, la reserva del hotel y la cita para el alquiler del coche. Estas son sólo algunas de las cosas en las que piensa una persona cuando va a realizar un viaje en avión. En este contexto, hay quienes pueden abrumarse en este tipo de situaciones y, como consecuencia, despistarse y no llegar a la hora adecuada al aeropuerto.

Así, también son muchos los factores que pueden provocar el retraso en la salida de un vuelo. Sin ir más lejos, problemas con el temporal o la huelga de los trabajadores de la aerolínea. Al final, el resultado de este segundo grupo de supuestos es el mismo que en los escenarios anteriores: el cambio en el organigrama del viaje. Ahora, la forma de solventarlos es distinta, ya que cuando la razón del cambio es ajena a la compañía, no hay posibilidad de recuperar el dinero del vuelo.

Si el despertador no ha sonado a tiempo, si ha habido problemas en la autopista o si se ha tenido que hacer un recado urgente, la responsabilidad de perder el vuelo recae sobre el propio pasajero. Ahora, no tiene por qué estar todo perdido.

Si no se llega a tiempo a coger un vuelo, la primera opción es acudir al mostrador de la aerolínea y explicar la situación. Si el avión aún no ha despegado, se podría intentar embarcar. Por otra parte, dentro de una misma aerolínea o incluso en un mismo vuelo, pueden existir diferentes tipos de billetes, cada uno con sus propias condiciones.

Algunas aerolíneas ofrecen billetes con una opción de recuperación del vuelo perdido: si no se llega a tiempo y el retraso no supera las cuatro horas,
los trabajadores podrán buscar al pasajero un asiento en el próximo vuelo disponible o reembolsarle el importe del billete.

Por último, en el peor de los casos, si no se puede reembolsar el precio del billete ni ofrecer una opción de vuelo alternativa, el cliente podrá reclamar las tasas aeroportuarias, un impuesto que cobra el aeropuerto por cada pasajero. Si no se coge el vuelo, la aerolínea no está obligada a pagar ese canon, por lo que debería ser posible recuperar esta cantidad. No obstante, se trata de un proceso lento, por lo que la devolución del dinero puede tardar hasta un mes en llegar.

Si se pierde un vuelo por causas propias, es el pasajero quien debe asumir el costo de un nuevo billete. No obstante, hay situaciones en las que es posible reclamar el reembolso. Por ejemplo, si la pérdida del vuelo se debe a un retraso en un vuelo anterior y ambos trayectos están operados por la misma aerolínea, la compañía está obligada a reubicar al viajero en otro vuelo sin coste adicional.

De igual forma, si no se ha podido embarcar debido a un overbooking, el pasajero tiene derecho a reclamar el reembolso del billete y, en algunos casos, a recibir una indemnización.