Andar es una actividad que nos gusta a la mayoría. Pero si por donde transitamos es por un sendero donde la historia y la tradición están presentes, aún más. De todas maneras, no siempre es necesario hacer estos derroteros caminando, sino que algunos de ellos se pueden hacer en vehículos.
Esto sucede en la Ruta Templaria, un trayecto triangular ubicado en pleno corazón de Portugal, en la región de Médio Tejo. Se trata de un camino militar que pasa por diferentes municipios y que llevó a cabo el escudero D. Gualdim Pais, quien, entre otras cosas, fundó la ciudad de Tomar. De hecho, por esta misma ciudad, pasa este itinerario, el cual tiene una gran historia oculta.
Portugal, un país históricamente ligado a los templarios
Los templarios fueron disueltos en el año 1312, tras la Bula Vox in Excelso expresada por el papa Clemente V. Sin embargo, el país luso se convirtió en un cobijo fiable en el que no temer por su supervivencia debido al apoyo del rey portugués Dionisio I. Además, de esta manera, podrían conservar gran parte de sus pertenencias que, en caso contrario, se les serían arrebatadas.
Es por ello que esta orden de caballería adquirió gran importancia en Portugal, especialmente en la zona central del país conocida como el “pentágono defensivo de los templarios”. En este contexto, surgió la conocida como Ruta Templaria, la cual une algunas de las localidades más relevantes para esta comunidad.
¿Por dónde pasa la Ruta Templaria?
El comienzo de la ruta se localiza en la ya mencionada ciudad de Tomar, conocida como la capital templaria. En este municipio, lo más destacable es el centro histórico, presidido por la Praça da República. En ella, se encuentra una estatua del propio Gualdim Pais, pero también se puede visualizar el Castillo de Tomar o el Convento de Cristo, considerado como Patrimonio de la Humanidad. Asimismo, también cabe destacar la Iglesia de Santa María do Olival, un templo del siglo XIII.
Tras ello, acudimos al sur a la isla de Amourol, un pequeño enclave del río Tajo que goza de un imponente castillo en su alto. Para llegar allí, es necesario coger un barco en el puerto de Amourol, que te llevará hasta esta fortaleza del siglo XII.
De este maravilloso destino arquitectónico, pasamos al municipio de Vila Nova da Barquinha, donde es imprescindible acudir al Centro de Interpretación de los Templarios de Amourol. En este espacio, podrás presenciar en primera persona la vida y costumbres de estos caballeros, mediante diversas exposiciones y salas de proyecciones.
Después, visitamos la ciudad de Torres Novas, la cual mezcla la historia templaria con su gran patrimonio natural con lugares como las Grutas de Lapas o el Nascente do Almonda. Finalmente, volvemos a desplazarnos hacia el norte para terminar nuestro recorrido en Ourém. Se trata de una destacada población medieval que ha sido testigo de numerosos enfrentamientos entre cristianos y musulmanes. En ella, cabe destacar el Castelo de Ourém, situado en el punto más elevado de la localidad y cuya conservación es realmente buena.