Con LaLiga EA Sports ya iniciada, hoy es el turno del Atlético de Madrid, el cual se medirá al Villarreal en La Cerámica, en un partido que cerrará la primera jornada del campeonato liguero. Sin embargo, antes de este encuentro, los jugadores y el técnico del primer equipo, Diego Pablo Simeone, han podido disfrutar de unas plácidas vacaciones en lugares de todo el mundo. Precisamente, el entrenador argentino comenzó sus días de descanso en un Safari en Sudáfrica, pero lo que más ha llamado la atención es el destino que ha escogido para realizar una escapada días antes del comienzo de la Liga.
Tal y como ha desvelado la cadena SER, el técnico colchonero y su familia han pasado unos días en la bella localidad de Brihuega, en Guadalajara. Esta villa se ha convertido en un destino turístico destacado por su riqueza histórica, su patrimonio arquitectónico y, especialmente, por sus campos de lavanda, que atraen a miles de visitantes cada año. Además, se sitúa en el valle del río Tajuña, en el corazón de la Alcarria, en mitad de un paraje repleto de huertas y jardines que le han dado el nombre popular de Jardín de la Alcarria.
En este sentido, Simeone, como ha compartido en su perfil de Instagram, aprovechó su estancia en Brihuega para integrarse plenamente en la vida social del municipio. “Disfrutando las fiestas del pueblo”, escribió en una storie , acompañando el texto con una imagen en la que se le ve sonriente en una de las calles del municipio, rodeado por una multitud de niños que le pedían selfies y autógrafos.
Simeone pueblerino y charanguero confirmed. Nuestro hombre. pic.twitter.com/rYGkeh1tNO
— 🇨🇿 (@puta_calor) August 12, 2024
Un castillo y tres iglesias
Brihuega, con una historia que se remonta a la época celtíbera, ha sido testigo de numerosos acontecimientos históricos que han dejado una huella imborrable en su patrimonio. Durante la Reconquista, la villa fue un importante enclave estratégico, lo que se refleja en su impresionante recinto amurallado, que todavía se conserva en buen estado. Estas murallas, construidas en el siglo XII, rodean el casco antiguo y ofrecen una visión única del pasado medieval de la localidad.
Uno de los elementos más destacados del patrimonio de Brihuega es su castillo, conocido como el castillo de la Peña Bermeja. Esta fortaleza, situada en un promontorio rocoso, fue construida en el siglo X y ha sido testigo de numerosas batallas y conflictos a lo largo de los siglos. El castillo, que en la actualidad es de propiedad privada, ha sido restaurado en varias ocasiones, pero conserva su esencia medieval y es un recordatorio de la importancia estratégica de Brihuega en la historia de la región.
Más allá de esta construcción, las calles de la villa muestran una arquitectura típica castellana e invitan a perderse a través de su trazado medieval. A su vez, conducen a los demás puntos de interés que conforman su casco histórico, el cual fue declarado conjunto histórico artístico. Así, la localidad alberga un rico patrimonio eclesiástico que se traduce en sus tres templos del siglo XIII: la iglesia de San Felipe, la iglesia de San Miguel y la iglesia de Santa María de la Peña. También quedan restos de la antigua iglesia de San Simón. A estas construcciones se le suma también la Real Fábrica de Paños, construida en el siglo XVIII.
La fiesta de la lavanda
El mayor distintivo de Brihuega es la lavanda. Cada mes de julio, los campos de lavanda de la localidad florecen y transforman el paisaje en un mar de color púrpura. Esta floración ha dado lugar a la celebración anual del Festival de la Lavanda, un evento que combina la belleza natural con la cultura y la música, y que atrae a miles de turistas de todas partes del mundo. Durante la fiesta, que se celebra a mediados de julio, los visitantes pueden disfrutar de conciertos al aire libre, visitas guiadas a los campos y a las destilerías donde se procesa la lavanda, así como de la gastronomía local, que incorpora la lavanda en recetas tradicionales.
Pero esto no es todo, pues los alrededores del pueblo permiten disfrutar de un entorno natural envidiable. La villa está rodeada de rutas y caminos que serpentean a través de la Alcarria, ofreciendo vistas panorámicas del paisaje alcarreño. Entre las rutas más populares se encuentra la subida al Pico de la Peña Bermeja, desde donde se puede disfrutar de una vista espectacular de los campos de lavanda y del río Tajuña.
Cómo llegar
Desde Madrid, el viaje es de alrededor de 1 hora y 10 minutos por la carretera A-2. Por su parte, desde Guadalajara el trayecto tiene una duración estimada de 25 minutos por las vías A-2 y CM-2011.