Durante el verano, las playas y los pueblos marineros se llenan de turistas que buscan disfrutar de unos días agradables en sus vacaciones. En el caso de Portugal, regiones como el Algarve se convierten en destinos de primer orden gracias a sus encantos únicos. Esto no es de extrañar, pues esta región cuenta con enclaves tan singulares como las cuevas de Benagil, la ciudad de Lagos o la playa de la Albufeira. Sin embargo, el país vecino tiene mucho más que ofrecer, ya que en su interior, se ubican otros espacios que son menos conocidos pero igual de impresionantes.
En ellos, las cascadas, ríos, montañas y valles se suceden dando lugar a parajes que parecen sacados de un cuento y que bien merecen una visita. En este sentido, las playas fluviales cobran un protagonismo especial, y más aún durante el periodo estival. Así, en el distrito de Coimbra, concretamente en el municipio de Penacova, se encuentra una de las más impresionantes de Portugal. Estamos hablando de Vimeiro, una playa de interior bañada por el río Alva que en 2023 fue elegida como la “Playa fluvial del año” según una votación promovida por la revista “Guia das Praias Fluviais”, basada en una selección de más de doscientas localidades, del norte al sur del país.
Todo tipo de servicios
La playa fluvial de Vimerio “destaca por el entorno bucólico del paisaje”, tal y como señala la página web del Ayuntamiento de Penacova. Su cascada, formada por la caída del río Alva, es un elemento distintivo que permite disfrutar de una zona tranquila de baño. De hecho, es un destino perfecto para disfrutar en familia, donde los más pequeños de la casa pueden darse infinitos chapuzones con total seguridad. Esto es gracias a que cuenta con infinidad de servicios y comodidades, entre los que destacan un equipo de seguridad y vigilancia.
Igualmente, en los alrededores de la playa se puede disfrutar de un área de descanso con zonas de pícnic, al mismo tiempo que incluye un bar y un restaurante. A esto se le suma su fácil acceso, el cual cuenta con una zona de aparcamiento y de ocio que han sido completamente remodelados en los últimos años, transformando esta playa del río Alva en uno de los espacios de ocio más agradables de la comarca. A esto se le suma un espacio de duchas y la posibilidad de alquilar embarcaciones ligeras para vivir una experiencia más completa.
Todo ello ha hecho que reciba la Bandera Azul gracias a su calidad y servicios, y ha sido considerada también como Calidad Oro por la asociación ecologista QUERCUS. Igualmente, “en la ladera de la playa encontramos un grupo de casas construidas en esquisto, además de un molino de agua y una noria que confieren al lugar un ambiente pintoresco y acogedor”, añade la página de la ABAE (Associação Bandeira Azul).
Cómo llegar
Desde Coimbra, el viaje tiene una duración estimada de 40 minutos por la carretera IP3. Por su parte, desde Oporto el trayecto tiene una duración estimada de 1 hora y 30 minutos por la vía A1 (hay peajes).