Los pueblos del norte de Portugal con castillos y puentes históricos rodeados de piscinas naturales y cascadas

Ponte da Barca y Lindoso ofrecen a los turistas multitud de actividades en plena naturaleza

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El castillo de Lindoso en Portugal (Wikimedia Commons).
El castillo de Lindoso en Portugal (Wikimedia Commons).

Ponte da Barca es uno de esos tesoros ocultos en la región del Miño, en Portugal. Situado a poco más de una hora de Oporto y a minutos del Parque Nacional Peneda-Gerês, el encantador pueblo se rodea por paisajes verdes y el río Lima, que atraviesa la región con su caudal tranquilo. Sus raíces históricas son profundas, remontándose a la época prehistórica, con una rica diversidad de grabados rupestres, necrópolis megalíticas, dólmenes y menhires que dan testimonio de la ocupación humana desde tiempos inmemoriales.

El puente medieval sobre el Río Lima es uno de los puntos más fotografiados y emblemáticos del norte de Portugal. Sus arcos reflejados en las aguas ofrecen una postal idílica que se ha convertido en un símbolo de la región. La calidez y hospitalidad de los locales complementan una oferta gastronómica rica y variada, donde platos típicos como el bacalao y las carnes al estilo “Minho” se maridan perfectamente con los vinos de la zona. Desde la web VagaMundos, con el fin de facilitar la experiencia de los visitantes, han desarrollado un mapa interactivo detallado que incluye lugares para visitar, opciones de hospedaje y recomendaciones culinarias.

Entre las reliquias históricas que se pueden visitar en Ponte de Barca se encuentra el “Pelourinho Manuelino”, la Iglesia Manierista de la Misericordia y la Igreja Matriz, un impresionante conjunto arquitectónico barroco y manierista. Además, el Jardim dos Poetas o el antiguo Mercado Pombalino de 1752 ofrecen una experiencia única que transporta a los visitantes a diferentes eras de la historia local.

Lindoso: una joya histórica y natural

En las cercanías de Ponte da Barca, la aldea de Lindoso se erige como otro gran atractivo. Conocido por su imponente castillo y la mayor colección de hórreos de la Península Ibérica, también ofrece acceso a algunas de las cascadas y lagunas más sorprendentes del Parque Nacional Peneda-Gerês. Para los amantes de la naturaleza y la aventura, la región de Lindoso y la Serra Amarela ofrecen una serie de rutas que llevan a cascadas y lagunas escondidas, como la Lagoa de Chão d’Além o el Poço do Froufe, lugares perfectos para un refrescante baño en medio de un entorno natural casi virgen.

VagaMundos asegura que explorar estos parajes requiere de una buena preparación, ya que algunos de los senderos son exigentes, demandando botas de montaña y un espíritu aventurero. Por ejemplo, para acceder a la Cascada Poço da Baraceira, hay que atravesar senderos escarpados y rocas resbaladizas, lo que hace que sea una excursión reservada para los más intrépidos.

Los hórreos de Lindoso en Portugal (Wikimedia Commons).
Los hórreos de Lindoso en Portugal (Wikimedia Commons).

Asimismo, para quienes buscan una experiencia más completa, deben recorrer el sendero Moinhos de Parada, una ruta circular de siete kilómetros que permite descubrir no solo la belleza natural de la zona, sino también su riqueza cultural. A lo largo de este recorrido, como describe Green Trekker, los visitantes pueden ver antiguos molinos, cursos de agua cristalina y disfrutar de la tranquilidad de la montaña.

Igualmente, dentro de esta ruta se encuentra el Poço da Gola, una laguna cristalina alimentada por el arroyo Mulas y el río Ponte, con dos cascadas que descienden de la Serra Amarela. Esta maravilla ubicada a lo alto del sendero de los molinos de Parada, se completa con un puente panorámico y fascinantes cursos de agua, ofreciendo un paisaje que muchos consideran uno de los mejores de la región.

La fortaleza del siglo XIII con una cascada propia de Lindoso

En contraste con la gran oferta natural que brinda esta pequeña localidad, también se puede disfrutar de sus monumentos históricos de fascinante contemplación. A un par de minutos de la Porta de Lindoso y la Igreja Matriz de Lindoso se llega al Castillo de Lindoso. Según informaciones de Nit, esta fortaleza fue construida bajo el reinado de Alfonso III y reconstruido por orden de D. Dinis en 1278. Así, el castillo sirvió como un importante bastión de defensa y vigilancia durante las guerras de Restauración portuguesas.

El castillo de Madrid que está en plena ciudad y en mitad de un parque: se puede visitar y es gratuito.

Durante las guerras de Restauración portuguesas, la fortaleza se convirtió en un elemento crucial para la conservación de la soberanía nacional, jugando un papel vital en las duras batallas que afirmaron la independencia de Portugal. Hoy en día, es posible visitar el castillo de manera gratuita y disfrutar de las vistas panorámicas que ofrece, incluyendo los hórreos y el embalse de la presa.

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