Cada vez son más los espacios naturales que se están viendo afectados por la actividad humana. En este sentido, numerosos entornos donde la están contando cada vez con más presencia contaminante de parte de personas que lo visitan. Este fenómeno, presente en todo el mundo, ha provocado que muchos gobiernos e instituciones oficiales vean como solución clausurar o restringir estas zonas naturales.
Esto mismo ha sucedido en una de las playas más destacadas de Portugal, localizada en el Algarve. De hecho, es considerado por muchos como el lugar más fascinante de toda la región lusa. Nos referimos a la playas del Algar de Benagil, una parte de la costa oceánica situada en el interior de unas impresionantes cuevas.
Algar de Benagil: restringido a partir del 16 de agosto
El desembarco en estas cuevas, las cuales son uno de los mayores reclamos turísticos del Algarve, estará vetado a partir del 16 de agosto de este mismo año. Esta medida ha sido llevada a cabo por la Autoridad Marítima Nacional, en conjunto del Ayuntamiento de Lagoa, el Instituto de Conservación de Naturaleza y la Región de Turismo del Algarve, entre otros.
Dentro de estas limitaciones se incluye la prohibición de cualquier tipo de desembarco y uso de la arena de la playa del interior de la cueva. Asimismo, no solo se restringirá el acceso a los turistas, sino que cualquier actividad lucrativa de cualquier empresa como alquiler de kayaks o embarcaciones también estarán vetadas. Tampoco se podrá acceder a estas playas nadando desde otro punto del litoral. Sí se permitirá el acceso a la cueva en embarcaciones o kayaks, pero con un número límite diario. Asimismo, se establecerán horarios máximos para la visita.
La razón principal por la cual se ha llevado a cabo esta medida es el gran impacto negativo que estaba suponiendo el turismo en la estructura geológica y la vida marítima de la zona. De hecho, así como afirma la Comisión de Coordinación y Desarrollo Regional del Algarve, “el sector del turismo marítimo es una de las industrias que ha experimentado un crecimiento más rápido y significativo en las últimas décadas”. Por tanto, tuvieron que adoptar esta contundente solución, ante la mayor atracción de turismo del Algarve.
Unas restricciones que no son nuevas
A pesar de la contundencia de estas últimas restricciones, no son las únicas que se han llevado a cabo en la playa del Algar de Benagil. Recientemente, en el año 2023, ya se puso en vigor una medida que restringía en gran medida la entrada de canoas, kayaks y tablas de surf en esta playa. De hecho, no fue la única playa que se vio afectada por estas prohibiciones, sino que afectó hasta a 6 playas diferentes de la zona.
Además, no solo se realizaron estas prohibiciones con la intención de preservar el entorno natural, ya que también se hizo como una forma de proteger a los bañistas. La playa del Algar de Benagil, al estar en el interior de una cueva, ha contado de manera puntual con desprendimientos de parte de la gruta, que han podido poner en peligro a algún que otro turista.