La Costa del Sol se ha consolidado como uno de los destinos predilectos tanto para los españoles como para los turistas extranjeros que buscan disfrutar de nuestras costas. Este enclave litoral, con 160 kilómetros de extensión, ofrece una amplia gama de opciones que van desde playas de arena dorada y aguas cristalinas hasta la posibilidad de disfrutar de la gastronomía típica en sus numerosos chiringuitos. Además, el clima privilegiado de la región, caracterizado por temperaturas agradables durante la mayor parte del año, permite la práctica de actividades acuáticas y el baño en el mar.
Todo ello convierte a Málaga en uno de los lugares más frecuentados durante el verano. Esto hace que, en ocasiones, sus playas se encuentren masificadas o con un alto nivel de ocupación, sin embargo, existen otros arenales algo más alejados de las grandes ciudades y menos conocidos que permiten desconectar y relajarse. Uno de ellos es la playa de Calaceite, un arenal perteneciente al municipio de Torrox que está rodeado de un hermoso entorno natural y apartado de construcciones y apartamentos.
Igualmente, la playa de Calaceite se extiende a lo largo de aproximadamente 400 metros de arena negra y fina, ofreciendo un rincón de tranquilidad y belleza para los amantes del mar y el sol. A diferencia de otras playas más concurridas en la región, Calaceite mantiene un equilibrio perfecto entre el desarrollo turístico y la preservación de su entorno natural, lo que la convierte en un destino ideal para quienes buscan una experiencia más apacible y auténtica.
Una playa única
Las aguas de la playa de Calaceite son cristalinas y presentan un tono azul intenso que contrasta de manera espectacular con el color oscuro de su arena. Por no hablar de los acantilados que escoltan al arenal, los cuales terminan de completar una imagen de postal. Igualmente, este entorno marino, libre de grandes aglomeraciones, resulta perfecto para la práctica del esnórquel, permitiendo a los visitantes explorar un fondo marino diverso y rico en flora y fauna.
A su vez, a pesar de estar alejada de las urbes, cuenta con numerosos servicios como es el parking gratuito y las duchas públicas, sin embargo, no alberga chiringuitos y para alojarse se debe hacer en Torrox, municipio que está a 10 minutos en coche. Cabe destacar también su acceso, pues es bastante sencillo hasta la zona de aparcamiento habilitado. Además, gracias a sus aguas tranquilas, es un destino ideal para refrescarse en los meses de verano con los más pequeños de la casa y pasar un día agradable. Aunque gracias a sus suaves y buenas temperaturas, el baño se puede hacer prácticamente durante todo el año.
Cómo llegar
Málaga se encuentra a unos 55 kilómetros de la playa de Calaceite, por lo que el viaje desde la ciudad es de alrededor de 45 minutos por la carretera A-7. Por su parte, Granada se sitúa a casi 100 kilómetros de distancia, siendo el trayecto de una duración estimada de 1 hora y 15 minutos por las vías A-44 y A-7.