Es uno de los pueblos más bonitos de Mallorca y se encuentra en una sierra que es Patrimonio de la Humanidad

Cobijado por el bosque y las montañas de la Sierra mallorquina de Tramontana, se ubica el pueblo de Fornalutx, un municipio distinguido por ser uno de los más bonitos de la isla.

La combinación de su paisaje con sus edificios de piedra, sus tejados rojos y sus enormes fincas es la razón que le ha llevado a abrazar esta envidiable categoría. Así, la cultura y la tradición se dispersan por cada rincón de una localidad, que hoy da prueba de más de 1000 años de historia.

Fornalutx tiene una joya única: su casco histórico, distinguido por un trazado medieval perfecto para recorrerlo a pie. Las callejuelas estrechas, adoquinadas y empinadas, están flanqueadas por casonas de piedra con tejados rojos y contraventanas coloridas son las que dan al pueblo una identidad propia. Los limoneros, naranjos, buganvillas y geranios añaden el color al entorno.

Por su parte, la Plaza de España es el centro neurálgico del pueblo y punto de reunión para los residentes. Alrededor de ella a se encuentran comercios, bares y restaurantes con terrazas. Además, a escasos metros se localiza el Ayuntamiento, un edificio emblemático que cuenta con una torre de defensa del siglo XVII. Junto a él se halla, por un lado, la Iglesia, un templo del siglo XIII que combina estilos gótico y barroco. De igual modo, junto a él se localiza Can Xoroi, una casa noble que a día de hoy funciona como centro cultural y expone fotografías antiguas que muestran el pasado del pueblo.

La Sierra de Tramontana es reconocida como Patrimonio Mundial de la Humanidad, por lo que al acercarse a Fornalutx también conviene visitar los alrededores del pueblo. Su impresionante ubicación la sitúa como un destino o ideal para senderistas y ciclistas. Su proximidad a la conocida ruta GR221, que recorre esta cordillera, lo convierte en un punto estratégico para los amantes de la naturaleza y el deporte al aire libre.

Son varias las rutas naturales que parten desde la villa. Rodeadas de montañas, bosques y praderas, destacan el Camí de l’Alzina Fumadora, un recorrido circular de 7 kilómetros que ofrece vistas a Fornalutx y Sóller. De igual forma, también destacan el Camí d’Es Creuer, de 8 km, que finaliza en Biniaraix, y la ruta de 3,2 km de Fornalutx a Sóller, con paisajes montañosos y cascadas. Además de Fornalutx, la región alberga pueblos como Deyá y Valldemossa, famoso por su Cartuja y la estancia de Chopin y George Sand.

De igual forma, quienes quieran dejar un tiempo para el turismo de playa en su vista a Fornalutx, podrán acercarse al Puerto de Sóller, conectado con la localidad a través de un tranvía. La distancia es de menos de 10 kilómetros.

Para llegar a Fornalutx desde Palma de Mallorca se puede tomar la carretera Ma-11 hacia Sóller y seguir las señales hacia Fornalutx, en un trayecto de aproximadamente 45 minutos. Otra opción es el tren histórico a Sóller y luego un autobús local o taxi. La última vía es coger el autobús 204 desde Palma a Sóller y cambiar a un autobús local hacia Fornalutx.