Los viajes a sitios desconocidos y pintorescos son los que más se disfrutan en verano, más si los destinos están cruzando la esquina. Viajar con amigos o familiares también potencia la experiencia y crea recuerdos inolvidables. De esta manera, la cercanía del destino permite disfrutar más del tiempo en el lugar, sin el cansancio que pueden generar trayectos largos. Con la llegada del verano, los destinos locales ganan popularidad entre aquellos que buscan una escapada rápida y placentera.
Así, a pocos kilómetros de España, pasando los Pirineos, se ofrece una gran variedad de destinos ideales para una escapada de verano. En Francia se pueden encontrar desde encantadores pueblos junto al mar o montañas rocosas, hasta lugares de ensueño con lagos y cascadas cristalinas.
Y es que, hay muchos secretos por descubrir en estos sitios al otro lado de la frontera, que destacan por su autenticidad y su atractivo turístico más local, lo que hace que se conviertan en joyas por explorar.
Saint Jean Pied de Port
Saint Jean Pied de Port, una encantadora villa medieval ubicada en el departamento de Pirineos Atlánticos, en la región de Nueva Aquitania, se erige como un refugio de historia y cultura en el territorio histórico de la Baja Navarra. Algo curioso, es que en 2010, un sorprendente 68% de su población era vascohablante.
Este pintoresco pueblo, a solo 7 kilómetros de la frontera con España, está rodeado de murallas de gres, recibe a los visitantes con sus calles empedradas y sus casas de fachadas blancas y ventanas rojas. Uno de sus principales atractivos es el puente que cruza el río Nive, lo que añade otro nivel de belleza a su ya impresionante panorama. Los viajeros que buscan disfrutar de una vista espléndida de la localidad y del verde del País Vasco son animados a subir hasta la entrada de la ciudadela. Este esfuerzo es recompensado con una vista panorámica que cautiva a cualquiera.
Lago de Gaube
El lago Gaube, ubicado en el Valle de Cauterets en los Pirineos, es descrito como un auténtico paisaje de cuento. Se encuentra a una altura de 1.800 metros, rodeado de montañas que se reflejan en sus tranquilas aguas, con el pico Vignemale destacando en el horizonte. Cauterets, que es una reserva natural, ofrece múltiples rutas para acceder a este impresionante lugar.
El acceso al lago Gaube puede realizarse mediante una ruta de senderismo de aproximadamente 5 kilómetros desde Pont d’Espagne. Desde este mismo punto de partida, también es posible utilizar un telesilla para disfrutar del trayecto desde las alturas, lo cual es una opción popular para muchos visitantes.
Cascada de Gavarnie
La cascada de Gavarnie, conocida también como Grande Cascade de Gavarnie, se erige como la más alta de Francia y la segunda de Europa fuera de Noruega, con una impresionante caída de 423 metros. Este magnífico salto de agua, alimentado por el deshielo de los glaciares de los Pirineos, ofrece un espectáculo natural inolvidable.
Para llegar a este majestuoso lugar, los visitantes pueden embarcarse en un recorrido de senderismo que parte del pueblo de Gavarnie. La ruta principal hacia la Gran Cascada presenta una dificultad media y requiere aproximadamente 3 horas y 20 minutos para completarse. Además, esta caminata es considerada una de las más icónicas y esenciales en los Pirineos.
Asimismo, desde el propio pueblo se pueden iniciar varias excursiones alternativas que permiten admirar el circo de Gavarnie desde diferentes perspectivas.
Colliure
Collioure, ubicada en el departamento de los Pirineos Orientales dentro de la región de Occitania en Francia, es una joya a orillas del mar Mediterráneo que ofrece una combinación única de belleza natural y patrimonio histórico. Esta encantadora comuna, descrita en su página oficial de turismo como “un puerto catalán, pueblo de pescadores, con patrimonio medieval y colores soleados de la costa mediterránea”, atrae por su impresionante oferta cultural y paisajística.
Entre sus principales atractivos se encuentran el Castillo Real y la Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, dos lugares históricos que invitan a un viaje en el tiempo. Calles llenas de fachadas coloridas y tranquilas terrazas con vistas inigualables son parte del encanto que sedujo a reconocidos artistas como Henri Matisse, Derain y Picasso.
Villefranche-de-Conflent
Villefranche-de-Conflent, una comuna francesa situada en el departamento de Pirineos Orientales, es conocida por su sobresaliente patrimonio arquitectónico y natural. Este pintoresco pueblo medieval se encuentra justo en la confluencia de los ríos Têt, Cady y Rotja, y es clasificado como uno de los Plus Beaux Villages de France.
El entorno natural que lo rodea es privilegiado, y sus características defensivas históricas son evidentes en sus imponentes murallas. Entre las joyas arquitectónicas del lugar destacan el puente de San Pedro, la torre campanario del Ayuntamiento, la iglesia de Santiago, y el imponente fuerte Libéria que domina la villa desde las alturas, así como la Cova Bastera.