El bonito pueblo situado a los pies de un macizo rocoso que es el más pequeño de la provincia de Cádiz

Localizado en el corazón de la Sierra de Grazalema, a los pies de un impresionante macizo rocoso, se encuentra Villaluenga del Rosario. Este particular enclave, conocido por ser el más alto de la provincia gaditana, es también el más pequeño del territorio andaluz.

Rodeado de montañas y vastos olivares, este municipio ofrece a sus visitantes un paisaje de gran belleza. Su historia, reflejada en la arquitectura tradicional y las festividades locales, captura la rica cultura y herencia de la región. Con todo ello, Villaluenga del Rosario es el lugar perfecto para conocer de cerca la identidad y la esencia andaluza.

La localidad de Villaluenga del Rosario está reconocida como uno de los Pueblos Mágicos de España, un título que pone el valor su enorme patrimonio arquitectónico y paisajístico. En este sentido, al visitar la localidad, es imprescindible recorrer su casco histórico y perderse entre sus calles, descubriendo edificios tan particulares como el ayuntamiento y las ermitas de San Gregorio y Calvario, que ofrece unas vistas impresionantes del pueblo y de sus alrededores.

Además, la Iglesia de San Miguel, ubicada en la Plaza de la Alameda, es un templo del siglo XVIII con planta mudéjar y cúpula barroca. La Plaza de Toros de Villaluenga, situada en la Calle Moreno de Mora, es considerada una de las más bonitas de la provincia de Cádiz. Las ruinas de la Iglesia del Salvador, saqueada e incendiada por los franceses a principios del siglo XIX, y la tienda Museo de Queso, que revela los secretos de este emblemático producto local, son otras paradas obligatorias. Por último, el cementerio de Villaluenga del Rosario, ha sido reconocido como uno de los más bonitos de España.

Más allá del propio pueblo, Villaluenga del Rosario cuenta con una amplia oferta de rutas de senderismo para los amantes de la naturaleza. Entre las más destacadas se encuentra, por un lado, la ruta de la Manga, de dificultad media. Esta última lleva a los caminantes por una estrecha franja de terreno entre dos formaciones montañosas.

La ruta de Pinsapar, con un itinerario bastante más exigente, atraviesa un bosque de pinsapos, una especie de abeto que solo se encuentra en esta región de España. Finalmente, la ruta de los puertos pasa por varios puertos de montaña ofreciendo vistas panorámicas del valle y las montañas circundantes.

Para llegar a este municipio desde Cádiz existen varias opciones, aunque la vía más rápida es por carretera. De esta forma, solo habrá que tomar la A 3-72 y seguir las indicaciones. El tiempo de viaje estimado es de una hora y media.

Una vez en el pueblo se recomienda ya no sólo limitar la visita a lo cultural, sino también reservar un tiempo para disfrutar de su oferta gastronómica. El municipio se ha ganado el reconocimiento mundial por sus quesos, especialmente por aquellos elaborados con leche de cabra payoya. En los últimos años, se ha convertido en sede de la Feria del Queso Artesanal de Andalucía, un evento que celebra la tradición y la calidad de sus productos lácteos.