Las cuatro islas españolas con playas paradisíacas que puedes visitar en un día

Destinos ideales para disfrutar del mar y de una jornada tranquila, lejos del bullicio

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Playa La Francesa y volcán Montaña Amarilla de fondo, en La Graciosa, islas Canarias (holaislascanarias.com). )
Playa La Francesa y volcán Montaña Amarilla de fondo, en La Graciosa, islas Canarias (holaislascanarias.com). )

En el caso de que alguien nos preguntara el número de islas que salpican las aguas españolas, probablemente nombraríamos las que conforman ambos archipiélagos y las Cíes y las Ons gallegas, y nos quedaríamos muy lejos del dato real. El país cuenta con 179 islas e islotes en toda la costa, algunos tan escondidos que pasan desapercibidos, pero que tienen playas paradisíacas y son perfectos para visitar en un día.

La Graciosa, Islas Canarias

Playa de las Conchas en La Graciosa, islas Canarias.
Playa de las Conchas en La Graciosa, islas Canarias.

El archipiélago canario guarda un rincón mágico digno de admirar. La Graciosa es la octava de las islas y esconde uno de los paisajes más salvajes y vírgenes del territorio español. Esta joya que navega en el océano Atlántico es el destino ideal para relajarse mientras se disfruta un patrimonio natural y paisajístico sin igual, cuyo mayor exponente son sus impresionantes playas de agua turquesa y arena blanca. A pesar de ser una isla pequeña en extensión, cuenta con numerosas calas: La Francesa, La Cocina, Las Conchas, Ámbar, La Laja y el Salado son algunas de ellas. Junto a los islotes del norte de Lanzarote, pertenece a una de las tres Reservas Marinas de las Islas Canarias, con lo cual La Graciosa está completamente protegida y es el destino idóneo para practicar el buceo y observar los fondos marinos abruptos.

Isla de Ons, Galicia

A la entrada de la ría de Pontevedra, encontramos el que tal vez sea uno de los lugares más especiales de Galicia. Por sus playas paradisíacas, sus rutas y sus encantos únicos, la isla de Ons se ha convertido en uno de los destinos más visitados de la comunidad y no es para menos. Este paraíso del Edén se caracteriza por su biodiversidad, sus arenales vírgenes de aguas turquesas (y prácticamente heladas) y su patrimonio cultural. La mejor forma de descubrir los encantos que la isla aguarda y las leyendas que la envuelven, es a través de las rutas de senderismo que la recorren. Otra de las curiosidades de este lugar es que tiene su propia receta de pulpo, la caldeirada.

Islas Cíes, Galicia

La playa de Rodas en las Islas Cíes (Getty Images).
La playa de Rodas en las Islas Cíes (Getty Images).

Sin cambiarnos de comunidad, pero viajando de Pontevedra a Vigo, nos trasladamos a las Islas Cíes. Un tesoro natural en la ría de Vigo conformado por tres islas: Norte o Monteagudo, Del Medio o do Faro y Sur o San Martiño. Las dos primeras están unidas por la Playa de Rodas (nombrada por The Guardian como la mejor playa del mundo) y una escollera. Este archipiélago fue declarado Parque Natural en 1980 y promete al turista sumergirse en un espacio protegido de increíble belleza. En este lugar se alternan imponentes acantilados con arenales paradisíacos desde los que se puede disfrutar de unos atardeceres de película.

Isla de Tabarca, Comunidad Valenciana

El islote carece de carreteras y es un paraíso dentro de la Costa Blanca

Más que una isla es un archipiélago, ya que, está formado por los islotes de La Cantera, La Galera. Entre toda su indiscutible belleza destaca por sus playas paradisíacas, su espectacular pueblo amurallado, declarado Conjunto Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural, y por no tener carreteras. Tuvo un pasado bucanero e hizo las veces de cárcel para los prisioneros carlistas. Sus arenales principales son la Playa de la Faroleta y la Playa de Tabarca. En total, presume de albergar 11 calas en las que disfrutar de la vida mediterránea y la imagen de postal que las componen.

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