Un vuelo con destino Lanzarote se vio obligado a regresar a Edimburgo debido a que tres pasajeros embarcaron borrachos

El vuelo sufrió una demora de varias horas, lo que aumentó el descontento entre los demás pasajeros

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Aunque la mayoría de los vuelos transcurren sin incidentes, algunos se convierten en experiencias inesperadas debido a hechos inusuales. Uno de los factores determinantes es el comportamiento de los pasajeros, que en ocasiones resulta inapropiado y provoca numerosos altercados entre los viajeros. Tanto es así, que un vuelo de Ryanair con destino a Lanzarote, procedente de Edimburgo, se vio obligado a regresar a su punto de origen tras solo media hora de vuelo debido al comportamiento inapropiado de tres pasajeros en estado de embriaguez.

El vuelo, que despegó a las 16:20 horas del viernes, ya había experimentado un retraso de una hora y media, originalmente programado para salir a las 14:15 horas. Una pasajera a bordo relató que uno de los pasajeros, sentado junto a ella, ya mostraba signos de embriaguez antes de despegar, emanando un fuerte olor a alcohol y fumando un cigarrillo electrónico sin reparo.

“Era evidente que estaba borracho antes de despegar”, comentó la viajera, tal y como recoge el medio La Provincia. Tras el despegue, el grupo comenzó a gritar en inglés y sacaron una botella de vodka casi vacía, lo que llevó a la azafata a confiscar tanto la botella como el cigarrillo electrónico.

Un retraso de varias horas

El comportamiento del grupo obligó al piloto a tomar la decisión de regresar al aeropuerto de Edimburgo para garantizar la seguridad de todos a bordo. Al aterrizar, numerosos agentes de policía esperaban en la pista para subir al avión y arrestar a los causantes del altercado. Por su parte, los demás pasajeros tuvieron que esperar dentro de la aeronave durante otra hora antes de que el vuelo pudiera reanudar su trayecto hacia Lanzarote, donde finalmente aterrizó a las 23:15 horas.

Asiento de avión (Shutterstock).
Asiento de avión (Shutterstock).

Los pasajeros afectados por el retraso manifestaron su descontento con la gestión de la aerolínea durante el incidente. “No nos han dado ni un vaso de agua, una vergüenza”, criticó la pasajera afectada por la demora. Este incidente subraya los desafíos que enfrentan las aerolíneas en el manejo de comportamientos disruptivos y la importancia de las medidas de seguridad a bordo.

Otros comportamientos parecidos

Este suceso no es la primera vez que pasa en un vuelo, pues un pasajero “tuvo que ser sacado a rastras de un vuelo de TUI después de supuestamente agredir a un miembro de la tripulación de cabina y negarse a entregarle una botella de ginebra”, explican desde el digital británico METRO. Esto sucedió en el vuelo TOM778 de Glasgow a Antalya, en Turquía, que despegó a las 17.15 horas del viernes 24 de mayo.

Según informó el mismo medio, un pasajero a bordo ya se encontraba borracho al embarcar junto a su pareja. El individuo abusó verbalmente cuando le pidieron que entregara su alcohol y agredió a un auxiliar de vuelo. Menos de una hora después del despegue, se anunció que el vuelo se desviaría al aeropuerto de Newcastle, donde la policía retiró al hombre del avión.

“Los vieron borrachos mientras abordaban el avión. Se negó a entregar su propia botella de ginebra y se volvió verbalmente abusivo”, cuenta un pasajero en las declaraciones recogidas por METRO. “Se hizo un anuncio 45 minutos después del despegue de que nos estábamos desviando por motivo de un pasajero rebelde. Pasaron otros 45 minutos antes de que llegáramos a Newcastle, alrededor de las 7 de la tarde. Dos agentes de policía subieron al avión y lo esposaron, pero él se inquietó y subieron a bordo dos agentes más. Su compañera también fue sacada del avión entre un coro de abucheos mientras les señalaba a todos el dedo medio”, cuentan.

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