El pueblo de Cantabria conocido como la villa de los puentes y las torres que es uno de los más bonitos de España

La localidad destaca por su casco antiguo, declarado conjunto histórico-artístico y por su impresionante enclave a los pies de los Picos de Europa

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Potes, Cantabria.
Potes, Cantabria.

Cantabria es uno de los destinos más visitados de España gracias a sus encantos únicos. Su impresionante costa, repleta de paradisiacas y acantiladas playas, contrasta a la perfección con sus majestuosos paisajes de montaña, donde pequeños pueblos inundan cada rincón, ofreciendo una experiencia rural única. Así, muchos de ellos son conocidos mundialmente gracias a su rico patrimonio, como es el caso de Potes, una localidad que es la capital de la comarca de Liébana y sorprende al viajero con todos sus encantos.

Conocida como la villa de los puentes, de ahí su nombre, y de las torres, Potes se erige como un destino turístico de primer orden gracias a su arquitectura medieval, paisajes montañosos y vibrante vida local. La villa se encuentra cobijada bajo las montañas donde confluyen los cuatro valles de la comarca y los ríos Deva y Quivesa. Así, los amantes de la naturaleza encuentran en la localidad un refugio donde poder desconectar del estrés de las grandes ciudades y relajarse en un entorno natural de ensueño.

Puentes, torres y mucha historia

Potes cuenta con una historia que se remonta a la época romana, aunque fue durante la Edad Media cuando adquirió mayor relevancia. Así, aparece documentada desde mediados del siglo IX y desde los años finales del medievo estuvo vinculada a la Casa del Marqués de Santillana, primero, y a la del Infantado, después. Su casco antiguo, declarado conjunto histórico-artístico en 1983, es testimonio de su pasado medieval, sin embargo, “es el fruto de una profunda reconstrucción durante la dictadura debido a los brutales daños que sufrió en la Guerra Civil. Aquí, el Servicio Nacional de Regiones Devastadas y Reparaciones se tuvo que emplear a fondo”, explica Francesc Ribes en el libro Los pueblos más bonitos de la España vacía (Anaya Touring).

Potes, Cantabria.
Potes, Cantabria.

Esta restauración devolvió a Potes toda su esencia medieval, de la cual quedan infinidad de monumentos gracias a la dinastía de los Mendoza. Así, Íñigo López de Mendoza y de la Vega, marqués de Santillana, y su familia transformaron a Potes en la capital de Liébana, dejando un legado arquitectónico y cultural que sigue siendo visible hoy en día. Sus calles empedradas y rico conjunto monumental invitan al viajero a perderse y descubrir todos sus secretos. Tanto es así, que forma parte de la selección de los pueblos más bonitos de España.

De todos sus monumentos, la Torre del Infantado, construida en el siglo XV, es una de las obras más emblemáticas de los Mendoza. Este robusto edificio de mampostería con vocación militar se alza imponente en el corazón de Potes. Desde su mirador almenado, se pueden contemplar las espectaculares vistas de los Picos de Europa y la villa misma, ofreciendo una panorámica inigualable que combina historia y naturaleza. A pocos pasos de la torre, el puente de la Cárcel cruza el río Quiviesa, formando junto a la Torre del Infantado una de las imágenes más reconocibles de Potes.

Esta zona es un punto de confluencia, ya que a unos metros el Quiviesa se une al río Deva. En dirección opuesta, el puente Nuevo, el único habilitado para el tránsito de vehículos, conecta con el centro neurálgico de Potes, la plaza del Capitán Palacios. Esta plaza, con su pintoresco templete, es un lugar de encuentro y actividad, desde donde se accede al barrio del Sol, el más antiguo de la villa. Este barrio ha conservado su esencia medieval, al igual que el puente de San Cayetano, que es otro testimonio del pasado histórico de Potes.

Rutas Históricas y Naturales

Potes, en Cantabria (Shutterstock).
Potes, en Cantabria (Shutterstock).

Explorar Potes a pie es una experiencia enriquecedora gracias a sus diversas rutas históricas y naturales. Una de las más recomendadas es la ruta de unos dos kilómetros que pasa por los puentes desde abajo, siguiendo el cauce del Quiviesa hasta su confluencia con el Deva. Este paseo fluvial acompaña a los visitantes hasta las afueras de Potes, donde se puede admirar un antiguo molino, vestigio del pasado agrícola e industrial de la región.

Otra ruta destacada es la Ruta de los Escudos, que conecta las casas blasonadas de las familias nobles de Potes y aquellas de quienes hicieron fortuna en ultramar. Este recorrido es una guía perfecta para descubrir los rincones más bellos del casco antiguo. Las casas colgantes sobre el Quiviesa y el emblemático barrio de la Solana son paradas obligatorias en este itinerario, cada una con su propia historia y encanto.

Igualmente, desde el plano cultural, Potes celebra numerosas festividades que reflejan su rica historia, como la Fiesta de la Cruz y la Fiesta del Orujo. Estas celebraciones atraen a visitantes de toda España, interesados en participar en procesiones religiosas y degustar el famoso aguardiente local. A su vez, tampoco hay que olvidarse del entorno en el que se incrusta la villa, lo que la convierte en un punto de partida ideal para explorar el Parque Nacional de los Picos de Europa. Las rutas de senderismo que parten de Potes ofrecen vistas impresionantes y una oportunidad única para conectar con la naturaleza.

Cómo llegar

Desde Santander, el viaje es de alrededor de 1 hora y 40 minutos por las vías A-8 y N-621. Por su parte, desde Oviedo el trayecto tiene una duración estimada de 2 horas y 15 minutos por la carretera A-8.

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