A menos de una hora de la ciudad de Vigo, en el norte de Portugal, se ubica uno de los rincones más especiales de la región. Ponte de Lima, bajo el título de ‘la ciudad más antigua de Portugal’ destaca como uno de los pueblos más impresionantes del norte del país luso. Esto es gracias a su rico centro histórico, en el que se pueden contemplar capillas, iglesias, puentes y casas señoriales barrocas, y por su entorno natural, pues se incrusta entre las montañas de Arga y Oural.
Así, en sus alrededores se puede disfrutar de una belleza natural incalculable que lo convierte en un destino rural ideal para una escapada. De todos sus monumentos naturales, uno de los más destacados es el llamado Poço Pé do Negro, un paraíso donde el viajero puede conectar con la naturaleza más pura. Se trata de una piscina natural bañada por las aguas del río Mestre, entre las parroquias de Labruja, Bárrio y Cegãos, y que cautiva por su postal de cuento.
Un plan ideal para el verano
Ubicado entre la vegetación y alejado de las principales ciudades, el Poço Pé do Negro se ha convertido en un destino popular durante los meses de verano, ideal para refrescarse en los días más calurosos. Igualmente, desde hace tiempo, quienes visitan el lugar han observado una piedra oscura en el lecho del río, una característica que eventualmente se convirtió en la denominación oficial del sitio. Igualmente, la fuerza de las aguas sirvió en el pasado para un aserradero de madera, un molino de lino y molinos para moler diversos cereales.
El sitio también fue considerado para la producción de electricidad, aunque el proyecto no se completó y aún quedan vestigios de esa iniciativa. Por otro lado, visitar esta poza natural es bastante sencillo, ya que cuenta con fácil acceso, además de tener poca profundidad. Esto la convierte en un espacio ideal para el baño y en un plan perfecto para disfrutar en compañía de la familia y amigos, aunque cabe destacar que carece de servicios de vigilancia. Asimismo, sus características rocosas la hacen perfecta para escapar del bullicio, en un entorno alejado de los grandes centros urbanos.
Además de ser un refugio para las tardes de verano, esta zona es un punto destacado del Trail Pé do Negro, recorrido que se realiza anualmente en la ciudad. La quinta edición de este evento, organizado por la Escola Desportiva Limiana Trail, se celebrará el próximo 27 de octubre. Las inscripciones a esta actividad ya están abiertas y tiene un precio de 22 € por persona.
Rutas de senderismo
Más allá de esta competición, la poza se encuentra rodeada de rutas de senderismo que descubren todo su esplendor. Así, con una longitud de casi 14 kilómetros y una dificultad moderada, el sendero Pé do Negro es uno de los más destacados de la zona. El camino se inicia en la sede del Consejo Parroquial de Bárrio y Cepós, dirigiéndose hacia la Igreja Matriz de São Miguel de Bárrio. Desde este punto, los caminantes pueden disfrutar de un paisaje característico del Alto Miño, con sus tierras verdes y vibrantes. Poco después de comenzar la caminata, los participantes llegan a las deseadas piscinas naturales.
Igualmente, otra parada obligatoria en la visita es el santuario do Senhor do Socorro, el cual se ubica muy cerca de las pozas. Construido en la segunda mitad del siglo XVIII, destaca por su imponente escalinata, que le otorga un notable efecto escénico. Este santuario forma parte de los llamados templos de romería, que alcanzaron gran popularidad durante el período barroco. Entre los ejemplos más conocidos de este estilo se encuentran el Bom Jesus de Braga y el Santuario de Nossa Senhora dos Remédios en Lamego.
Cómo llegar
Desde Vigo, el viaje es de alrededor de 50 minutos por la vía A-3. Por su parte, desde Tuy el trayecto tiene una duración estimada de 30 minutos por la misma carretera.