El pueblo de Salamanca rodeado de acantilados y cuyo recinto amurallado ha sido declarado Conjunto Histórico Artístico

A las orillas del río Tormes y a menos de 40 kilómetros de la ciudad de Salamanca, se ubica uno de los núcleos poblacionales más hermosos de la provincia. El municipio de Ledesma se presenta como la puerta de acceso al Parque Nacional de los Arribes del Duero. Ahora, no sólo es la naturaleza lo que distingue a esta localidad. Por el contrario, la historia y la cultura también se asientan en cada rincón de este territorio.

El conjunto amurallado de Ledesma fue reconocido como Conjunto Histórico Artístico en 1975. Así, este se presenta como un conglomerado de iglesias, casas y construcciones palaciegas en el que los fantasmas de un pasado glorioso se apoderan del ambiente de la zona. Por su parte, el paisaje que rodea a este espacio aporta la calma que buscan sus visitantes.

Una moderna carretera que circula en paralelo junto al popular puente Viejo de Ledesma, construido en el siglo XV, es la que se encarga de llevar a turistas y residentes a la localidad. En un parque situado en la propia entrada del mismo, se halla el Menhir del Mirador, un monolito de piedra de forma cilíndrica e irregular que fue rescatado la Asociación Amigos de Ledesma.

Cerca de este, se observan restos de murallas medievales de origen prerromano que antiguamente protegían el castro vetón. La única de las ocho puertas de la ciudad que permanece en pie es la puerta de San Nicolás del siglo XII, ubicada en la parte occidental. Así, si se continúa el camino al interior del pueblo, el visitante llegará al corazón de este último.

La plaza Mayor es el centro neurálgico de Ledesma, rodeada de pórticos castellanos y casas de piedra. De ella destaca el Ayuntamiento, un edificio del siglo XV con estética fortificada que ha sufrido diversas modificaciones. También en la plaza se pueden ver la iglesia de Santa María la Mayor, un templo gótico construido sobre uno románico con una torre, el Museo de Arte Sacro, y el palacio de los Beltranes.

Así, la oferta de esta localidad es amplia. Recorriendo sus calles se pueden descubrir otros puntos de interés como la alhóndiga del siglo XVII, el hospital de San José del siglo XVIII, la iglesia de Santa Elena y la iglesia de San Miguel, que alberga el Centro de Interpretación Histórica de Ledesma. Sin embargo, uno de los monumentos más importantes es el castillo de Ledesma o de los duques de Alburquerque, una fortaleza muy reformada que ha perdido muchas de sus construcciones originales.

Por su posición privilegiada, Ledesma se presenta como un enclave único para los amantes del senderismo. Así, entre sus rutas más destacadas se encuentra la del Puente Mocho, que atraviesa la entrañas de la zona llevando a los visitantes por antiguos caminos romanos y mediales. En este caso, las vistas panorámicas del río Tormes y su entorno son la culminación de esta hermosa ruta.

Otra opción es la ruta de los Arribes del Tormes, que recorre los impresionantes acantilados de la zona. También se puede optar por la senda que bordea las murallas medievales de la villa, que proporciona una visión integral de la historia de Ledesma.