Cantavieja es un pequeño rincón del mapa que aguarda grandes batallas. La capital de Maestrazgo de Teruel, comarca con poco más de 3.000 habitantes, es uno de los pueblos más bonitos de España. Su ubicación sobre un peñón calizo a 1.300 metros de altitud ha marcado su devenir y su historia.
Este antiguo enclave musulmán, como apunta Francesc Ribes en su libro España Vacía, encabezó una encomienda de la orden del temple, de hecho ese término ‘Maestrazgo’ deriva de ‘gran maestre’, la máxima autoridad de las órdenes militares que durante siglos tuvieron jurisdicción sobre este territorio.
Podemos decir que Cantavieja es sinónimo de grandeza. Pese a su convulso pasado y los destrozos provocados por las tres Guerras Carlistas, la Guerra Civil y la Guerrilla de los Maquis, este municipio ha conservado su entramado medieval en torno a la bella plaza fortificada de Cristo Rey. En este lugar se alza la iglesia barroca de la Asunción que mantiene una magnífica torre construida en 1612 y un arco en la base para que pasen los viandantes.
La localidad turolense recibió el pasado octubre el premio Best Tourism Village, que es el Sello a los Mejores Pueblos Turísticos que entre la Organización Mundial del Turismo (OMT).
Una villa convertida en fortaleza
Ese pasado guerrero y su fisionomía de trazado medieval invita a callejear por sus rincones y descubrir todos sus miradores. Sólo un paseo bastará para observar que toda la villa es una fortaleza construida en forma de triángulo. En su extremo se construyó el castillo que fue residencia de los comendadores. Apenas quedan restos de las puertas y los torreones pasaron a formar parte de las viviendas. Aun así, la ruta que sigue el trazado de las defensas cantaviejanas ofrece unas vistas espectaculares del entorno.
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Castillo y muralla de Cantavieja
La población y el castillo de Cantavieja se asientan sobre una formación rocosa. Este emplazamiento proporciona una vista estratégica única de la región dada esa posición elevada. El conjunto fortificado es de planta triangular y muy alargada. A pesar de los daños sufridos a causa de las guerras, las murallas de mampostería permanecen en buen estado, incluyendo contrafuertes rectangulares y torreones, además de diversas aspilleras diseñadas para el uso de fusiles.
En el extremo apreciamos los restos de un torreón circular construido en el siglo XIX sobre la base de uno medieval de planta rectangular. Hasta hace pocos años, hizo las veces de ermita bajo la tutela del Calvario. En ese lado que mira a la población se alza un muro que cierra el patio del castillo con la puerta de acceso. Del interior, sin embargo, poco se puede mencionar, está arrasado y únicamente encontramos en él catorce peirones con las estaciones del Vía Crucis.
Aunque se levantaran murallas, la mejor protección para Cantavieja ha sido siempre su barranco. En aquellas zonas del casco antiguo donde este no ejercía de cercado natural, se levantaron muros para protegerse de los ataques.
Cómo llegar
La distancia que separa Cantavieja y Teruel es de 90 kilómetros y la duración aproximada del viaje es de 1 hora y 25 minutos circulando por la A-226.