El puente peatonal suspendido a 175 metros que es el más grande del mundo: se ubica en una de las rutas más impresionantes de Portugal

Con más de 500 metros de longitud, este puente es uno de los principales atractivos del geoparque de Arouca

Guardar
Puente 516 Arouca, en Portugal (Shutterstock).
Puente 516 Arouca, en Portugal (Shutterstock).

Portugal se presenta como un destacado destino para los amantes de la naturaleza, ofreciendo una diversidad de paisajes que atrae a numerosos visitantes. La geografía diversa del territorio portugués incluye escarpadas laderas, amplios valles, majestuosas cascadas y densos bosques. Esta riqueza natural convierte al país en un lugar ideal para el senderismo, actividad que se beneficia de una extensa red de rutas que recorren el país, permitiendo a los viajeros descubrir sus rincones más ocultos.

En este sentido, de todos los senderos que recorrer Portugal, las Pasarelas de Paiva (Passadiços do Paiva) se alzan como uno de los más impresionantes no solo del país luso, sino de todo el mundo. Este camino recorre el curso el río Paiva, en el geoparque de Arouca, reconocido por la UNESCO, a través de pasarelas de maderas y puentes colgantes. De estos últimos, el Puente de Arouca es uno de los principales atractivos de este recorrido gracias a sus dimensiones únicas.

Te puede interesar: El pueblo medieval que es uno de los más bonitos de Valencia: cuatro barrios históricos y una impresionante ruta en mitad de la naturaleza

El puente colgante peatonal más grande del mundo

Puente de Arouca, en Portugal (web del Puente).
Puente de Arouca, en Portugal (web del Puente).

Bajo el nombre de Puente 516 Arouca, esta pasarela es el puente colgante peatonal más grande del mundo. Esto no es de extrañar, ya que su propio nombre lo indica, pues cuenta con una longitud de 516 metros. A su vez, desde sus 175 metros de altura, el viajero puede disfrutar de unas impresionantes vistas del río Paiva. Pasando la pasarela, la garganta do Paiva y la cascada das Aguieiras, emergen con majestuosidad, dando lugar a un espectáculo único.

Una experiencia que es única en el mundo y que es solo apta para los más valientes, pues el vértigo acompaña durante todo el recorrido. Sin embargo, para poder disfrutarla es necesario adquirir una entrada con reserva previa, la cual se puede conseguir desde su portal web. Esta tiene un precio de 12 € para la tarifa general, y de 10 € para menores de 18 años y mayores de 65. Tal y como exponen desde su página web, esta entrada también permite realizar la ruta al completo de las Pasarelas de Paiva.

Uno de los paisajes más bonitos de Portugal

Passadiços do Paiva, en Portugal (web de la ruta).
Passadiços do Paiva, en Portugal (web de la ruta).

Las Pasarelas de Pavia se inauguraron en el año 2015, y desde ese momento han llamado la intención de millones de turistas de todo el mundo. La ruta, que puede iniciarse desde Espiunca o Areinho, ofrece los mismos atractivos sin importar el punto de partida. Con una extensión de aproximadamente ocho kilómetros y una dificultad elevada, el recorrido lineal solo varía en el orden de aparición de sus paisajes y elementos destacados. Cerca de Areinho se encuentra un tramo de escaleras con cerca de 500 escalones, lo que contribuye a su alta exigencia.

Durante 2 horas y 30 minutos, los viajeros pueden recorrer un paraje natural de gran belleza, con vistas a valles, cascadas y una diversidad de flora y fauna autóctonas. El sendero de madera atraviesa uno de los tramos más hermosos del río Paiva, ofreciendo paisajes que van desde zonas rocosas hasta densos bosques.

Te puede interesar: El pueblo que está dentro del parque natural más grande de España y tiene un santuario entre montañas

Entre los monumentos naturales que se pueden contemplar destacan la garganta de Paiva, la playa fluvial de Vau, la cascada das Aguieras, la gola do Salto y la falha de Espiunca. También es posible observar construcciones significativas como el puente de Alvarenga, el castillo de Carvalhais y el mencionado puente de Arouca.

Una de las rutas más impresionantes de Portugal: 600 kilómetros a través de 12 pueblos históricos
Guardar