Uno de los 10 hoteles más antiguos de España: casi 100 años, en él se grabó ‘The Crown’ y durmió Madonna

Ubicado junto a los Reales Alcázares y la Catedral de Sevilla se encuentra el hotel de cinco estrellas Alfonso XIII, una reliquia de otro tiempo. Declarado Bien de Interés Cultural desde 1998, le hace un homenaje a la capital hispalense en su estructura, decoración y referencias de arte. Un monumento cuya visita resulta obligatorio y que ha pasado a convertirse en un icónico punto de encuentro entre los sevillanos.

Al igual que el Colón Gran Meliá se construyó con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929 a principios del siglo XX, por orden del monarca que le dio el nombre y su mujer, Victoria Eugenia. Fue obra del arquitecto José Espiazu y Muñoz y se alzó entre 1919 y 1928. Finalmente, abrió sus puertas el 28 de abril de 1929 con la celebración de un suntuoso banquete presidido por los reyes.

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Son muchas las caras conocidas que se han hospedado en este hotel. Entre ellos, como apuntan Vanitatis y el Diario de Sevilla, Rosalía, Alejandro Sanz, el actor Orson Walles, la cantante Grace Kelly, el intérprete Harrison Frod, Madonna o Tom Cruise.

En estos 95 años, algunos miembros de la realeza también se han paseado por sus pasillos: el Príncipe Raneiro y Gracia de Mónaco, el Príncipe Carlos y la Princesa Diana, los Reyes de Suecia, Noruega, Marruecos, Nepal, Dinamarca, Jordania, Bélgica, Holanda o Grecia. También ha sido el alojamiento favorito de esos huéspedes por esa aura histórica y el encanto que envuelven al hotel.

Desde hace algunos años pertenece a la cadena Marriot y entre sus habitaciones más lujosas se encuentra la suite Royal, una estancia de 150 metros cuadrados; la suite Torrejón, desde la que poder disfrutar de unas vistas sin igual de la ciudad y la suite Reales Alcázares, inspirada en el romanticismo más lujoso. Los precios por noche oscilan entre los 392 euros y los 1.455 euros.

La arquitectura neomudéjar, con influencias árabes y un marcado regionalismo andaluz, define este emblemático edificio, como apunta la web Sevilla for you. Esta obra se erige como un testimonio de la pluralidad cultural y estética de la época. Además, se caracteriza por la riqueza de sus elementos decorativos elaborados a partir de materiales que se consideran modestos, como el ladrillo, el yeso, la madera y la cerámica.

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Este diseño se enlaza armoniosamente con el conjunto de edificaciones que se proyectaron para un evento tan importante como lo fue la Exposición Iberoamericana de 1929. Sus arquitectos supieron adaptar y fusionar elementos tradicionales y regionales en una expresión innovadora y representativa de su tiempo.

Al principio de la tercera temporada de The Crown (la serie que narra la historia de la familia real británica a lo largo de los años) se retrata un fascinante viaje de la princesa Margarita, quien se aventura por Estados Unidos marcando su presencia con notables celebraciones. En la producción de estos episodios destaca la elección de localizaciones icónicas, como el Hotel Alfonso XIII, para presentar un destino en Los Ángeles, debido a su arquitectura neomudéjar, la cual resonaba con las influencias coloniales y españolas de California, señala la Revista AD. Este estilo arquitectónico hacía de puente cultural entre España y California.

La presencia de la princesa Margarita en este escenario y las subsiguientes celebraciones evidencian la habilidad de la princesa para cautivar al público y a la prensa durante sus viajes, un fenómeno que la prensa norteamericana denominó como “margaritología”, en honor a la euforia que generaba su paso por el país.