El bonito pueblo enclavado en el corazón de los Pirineos que tiene dos de las iglesias románicas más importantes de Europa

Gracias a sus imponentes montañas y extensos valles, los Pirineos son uno de los parajes naturales más impresionantes de España. En ellos se pueden encontrar rincones maravillosos que dejan con la boca abierta a cualquier viajero. Así, bonitas cascadas, frondosos bosques y largos ríos rodean preciosos pueblos que mantienen la tradición y la cultural desde tiempos inmemoriales. Estos conforman destinos rurales de ensueño que permiten al viajero desconectar del estrés y del ajetreo de las grandes ciudades.

Así, uno de los más especiales es Taüll, una pequeña villa situada en el vall de Boí, en la provincia de Lleida. Esta destaca por su gran valor histórico y cultural que se incrusta en uno de los parajes naturales más impresionantes de nuestro país. Así, entre valles y picos, se puede encontrar un rico patrimonio que destaca por albergar dos de las iglesias románicas más emblemáticas de Europa: Sant Climent y Santa María de Taüll, ambas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

La magia de Taüll se manifiesta en sus dos iglesias románicas, Santa María de Taüll y Sant Climent de Taüll, cuyas torres se alzan majestuosamente contra el paisaje de montañas, siendo un testimonio del ingenio y la devoción de sus constructores medievales.

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De este modo, la iglesia de Sant Climent, emplazada en la parte baja del pueblo, emerge como el mayor exponente del románico catalán, siendo un testimonio viviente de la rica historia medieval de la región. Construida en el siglo XII, esta joya arquitectónica, de influencia lombarda, se alza orgullosa con su torre campanario de seis pisos que domina el paisaje, reflejo de la maestría de los constructores de la época. A su vez, cuenta con una proyección de viodemapping que recrea como estaba pintada la iglesia en el siglo XII.

Por su parte, la iglesia de Santa María se enclava en la Plaza Mayor y también es de estilo lombardo del siglo XII. Cuenta con una torre campanario de cinco pisos y en su interior se puede encontrar una reproducción de sus frescos. Pues los originales han sido trasladados al Museo Nacional de Arte de Cataluña en Barcelona para su preservación.

Más allá de su patrimonio artístico, Taüll y sus alrededores ofrecen una amplia gama de actividades al aire libre que aprovechan su privilegiado entorno natural. Durante el invierno, la estación de esquí de Boí Taüll atrae a entusiastas de los deportes de invierno, ofreciendo algunas de las mejores pistas de esquí del Pirineo. En verano, el paisaje se transforma, brindando oportunidades perfectas para el senderismo, el ciclismo de montaña y el rafting en las aguas bravas de los ríos cercanos.

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Así, el Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici brinda oportunidades únicas de turismo activo gracias a todos sus rincones mágicos. Alrededor de 30 senderos son los que recorren los bellos parajes de este parque nacional, ofreciendo una gran variedad de rutas para todo tipo de público y que hacen las delicias de los más aventureros.

Desde Lleida, el trayecto tiene una duración aproximada de 2 horas por la carretera N-230. Por su parte, desde Huesca el viaje es de alrededor de 2 horas y 10 minutos por la misma vía.