El pueblo de Soria que es uno de los más bonitos de España: arquitectura tradicional en mitad de un parque nacional

A lo largo de la península se pueden encontrar pueblos que son una maravilla. Estos son el reflejo perfecto de la tradición rural que se encuentra en el interior de algunos de los paisajes más impresionantes de España. Así, se convierten en destinos ideales para una escapada de fin de semana, lo que permite conocer y disfrutar un amplio abanico de atractivos. En este sentido, a los pies de la Sierra de Urbión, se localiza uno de los pueblos más bonitos, no solo de Soria, sino de toda España.

Estamos hablando de Vinuesa, una pequeña localidad que lo tiene todo, pues su rico patrimonio monumental se combina a la perfección con paisajes que quitan el aliento. De hecho, se incrusta en el corazón de la Tierra de Pinares, una zona que pertenece a lo que se conoce como la Soria Verde, y muy próxima enclaves tan especiales como la Laguna Negra y los Picos de Urbión. Un conjunto natural que ha bautizado a la villa con el sobrenombre de Corte de Pinares.

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El origen de Vinuesa se remonta a época prerromana, cuando estuvo habitada por los pelendones, una antigua tribu celtíbera. Bajo el nombre de Visontium, la ciudad cayó en dominio romano, lo que supuso la adaptación de las costumbres y cultura de la villa a las del Imperio. A lo largo de los siglos, el pueblo ha sido testigo de numerosos acontecimientos históricos, reflejados en su rica arquitectura y tradiciones.

La localidad fue de especial relevancia durante la Edad Media, momento en el cual se establece la Real Cabaña de Carreteros, una institución fundamental para el desarrollo económico de la zona, dedicada al transporte de madera y otros materiales desde los pinares de la región hacia distintas partes de España. Este organismo fue el motor principal de la villa y supuso un crecimiento que podemos descubrir a día de hoy gracias al bello cacho histórico que estableció alrededor de ella.

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Así, los balcones, blasones y escudos que adornan sus calles empedradas esperan al viajero en una travesía por la tradición e historia de la villa. La Plaza Mayor es el corazón de Vinuesa y se extiende entre casonas de piedra y puertas de arco carretero, flanqueada por el ayuntamiento, la iglesia y el seminario. Es el centro neurálgico de la villa y donde se reúnen los vecinos durante el día a día y la celebración de las fiestas. La iglesia de Nuestra Señora del Pino, de estilo renacentista, es fruto de la expansión económica de la villa y se ubica en la misma plaza.

Desde aquí, además, parten las principales arterias de la localidad, como es el caso de la calle Luenga. En ella se encuentran algunas de las construcciones más emblemáticas del pueblo, como son la Casa de los Leones, el palacio de Don Pedro de Neyla, la Casa de los Ramos o el Rancho. Todas ellas son ejemplos de la arquitectura civil que salpicó la villa durante los siglos XVII y XVIII.

Pero si hay que destacar alguna casona, esta es el Palacio de los marqueses de Valueña, un impresionante edificio levantado en el año 1764 que destaca por su imponente fachada. Igualmente, otras paradas imperdibles son la plazuela, el lavadero, el portalejo, la plaza de la Soledad y la ermita de San Mateo. También sobresale el puente romano, situado sobre el río Duero. Aunque ha sido remodelado en diversas ocasiones a lo largo de los siglos, sigue manteniendo su estructura original, que data de la época romana.

Más allá de su rico conjunto monumental, Vinuesa destaca por incrustarse en un entorno natural de ensueño. Así, bajo la Sierra de Urbión y entre las sierras de Duruelo y el Portillo de Pinochos, esta localidad atesora infinidad de encantos. Además, se encuentra bañada por las aguas del río Revinuesa y el Duero, el cual se ensancha y da lugar a uno de los embalses más importantes de su curso: el Embalse de la Cuerda del Pozo.

A esto hay que sumar que, a pocos kilómetros de Vinuesa, se localiza la Laguna Negra de Urbión, uno de los parajes naturales más impresionantes y emblemáticos de toda la provincia de Soria. Esta laguna de origen glaciar está rodeada de leyendas y mitos, siendo el escenario del famoso poema La tierra de Alvargonzález de Antonio Machado. La laguna, junto con el Parque Natural de la Laguna Negra y Circos Glaciares de Urbión, es un espacio ideal para los amantes de la naturaleza, pues permite realizar numerosas actividades al aire libre, como senderismo, montañismo y observación de flora y fauna.

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Desde Soria, el viaje hasta Vinuesa es de alrededor de 35 minutos por las carreteras N-234 y SO-810. Por su parte, desde Logroño el trayecto tiene una duración estimada de 1 hora y 25 minutos por la vía N-111.