El bonito pueblo español conocido como la ‘villa de las mil cascadas’ que tiene una ruta de senderismo y un patrimonio único

La comarca de Las Merindades es una de las regiones más bonitas de Burgos. En ella, se pueden encontrar rincones mágicos que dejan con la boca abierta gracias a su exuberante naturaleza y pequeños pueblos. Estos parecen sacados de un cuento de hadas y sorprenden con su pintoresco patrimonio histórico y cultural. Pero si por algo destacan es por ser destinos rurales de primer orden donde poder relajarse y desconectar del estrés de las grandes ciudades.

Así, entre cascadas y el sonido envolvente del agua, el pueblo de Tobera destaca por su belleza y encantos únicos. Esta pequeña localidad perteneciente al término municipal de Frías, acoge un casco histórico en el que diferentes saltos de agua discurren entre sus calles y casas. Esto le otorga un atractivo único que le ha servido para ganarse el sobrenombre del ‘pueblo de las mil cascadas’. Pero esto no se queda aquí, pues en sus alrededores se puede disfrutar de un bello entorno natural con múltiples rutas de senderismo.

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Tobera se incrusta en un maravilloso paisaje montañoso donde el agua es el principal elemento. Tanto es así, que el río Molinar atraviesa la localidad y hace acto de presencia con las innumerables cascadas que deja a su paso, creando un espectáculo visual y sonoro único. Desde todos los rincones del pueblo se pueden contemplar estos saltos de agua, incluso existe una pequeña ruta que recorre todos ellos y permite disfrutarlos de la mejor forma posible. Esta tiene una longitud de alrededor de un kilómetro y discurre por el conocido como Paseo del Molinar.

Estas cascadas, junto con los molinos restaurados, son testimonio de la armoniosa convivencia entre la actividad humana y la naturaleza, un equilibrio que ha definido la vida en Tobera a lo largo de su historia. Por otro lado, el patrimonio histórico y cultural del pueblo también juega un papel importante. Su trazado medieval y sus casas de piedra, invitan a los visitantes a sumergirse en el pasado y explorar el rico legado que alberga.

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De todos los monumentos que se pueden encontrar en la villa, destaca la conocida como ermita de Nuestra Señora. Se trata de un templo situado en el límite del pueblo, y se levantó en el siglo XIII sobre un peñasco, dominando el paisaje y ofreciendo una vista fascinante del entorno conocido como la Hoz de Tobera. La arquitectura de la ermita, con sus elementos románicos, no solo es un testimonio de la fe y devoción de sus habitantes, sino también de la importancia de Tobera en la ruta espiritual y cultural de la región.

Junto a esta construcción, el puente medieval de la villa se alza como el otro gran atractivo monumental. Esta estructura cruza el río y a día de hoy permite descubrir un tramo de la antigua calzada romana que comunicaba Briviesca con Orduña y los puertos del norte a través del desfiladero del Molinar.

Desde Burgos, el viaje hasta Tobera es de alrededor de 1 hora por las carreteras AP-1 y BU-504. Por su parte, desde Vitoria el trayecto es de alrededor de 1 hora y 10 minutos por la vía A-1.