Carlos Alcaraz se prepara para empezar la temporada: las novedades en el juego del tenista murciano para este 2025

Carlos Alcaraz ha vuelto a las pistas para preparar una nueva temporada después de un breve tiempo de descanso. El lunes 9 de diciembre, tras unas vacaciones en República Dominicana y participar en dos exhibiciones en Estados Unidos, el tenista murciano dio inicio a su pretemporada de cara al primer gran reto del año: el Open de Australia. Durante las semanas previas, ha entrenado tanto en la Ferrero Tennis Academy, ubicada en Villena, como en el Club de Campo de Murcia, alternando ambos escenarios para afinar los detalles necesarios en su juego y mejorar sus estadísticas.

El gran objetivo de Alcaraz no es solo tener una buena actuación en Melbourne Park, sino convertirse en el jugador más joven en la historia del tenis en conquistar los cuatro títulos del Grand Slam, un récord actualmente en manos de Rafael Nadal. A sus 22 años, el talentoso jugador español espera que su preparación y las modificaciones en su técnica le permitan alcanzar este logro histórico en 2025.

Durante esta pretemporada, acompañado por su entrenador Juan Carlos Ferrero, Alcaraz ha trabajado en pulir aspectos específicos de su juego. Una de las áreas que han recibido más atención es su golpe de derecha, una de sus principales armas en el circuito. Para potenciarlo, Ferrero decidió experimentar con su raqueta, probando diferentes configuraciones antes de añadir cinco gramos de peso en el cuello del marco mediante cintas de plomo. Este ajuste no es un detalle menor, ya que tiene el objetivo de incrementar la aceleración, la potencia y el peso de la pelota en cada golpeo.

Samuel López, uno de los técnicos de su equipo, ha explicado que este ajuste permitirá a Alcaraz aprovechar mejor su impacto en los intercambios. “Gracias a su velocidad de golpeo, con una raqueta más pesada puede generar más potencia y sacar mayor partido a la propia fuerza de la pelota rival”. Estos cinco gramos adicionales en la raqueta pueden marcar la diferencia al enfrentarse a jugadores que destacan por su potencia, como Jannik Sinner y Alexander Zverev, nombres recurrentes en partidos clave.

Otro aspecto del juego de Alcaraz que ha recibido especial atención esta pretemporada es su saque, un área que el propio tenista ha reconocido como un punto débil. La temporada pasada, el español perdió su servicio en numerosas ocasiones, destacando 119 dobles faltas a lo largo del año, un dato que claramente pesó en su rendimiento y que su equipo técnico no ha querido pasar por alto.

Con el fin de mejorar este aspecto, Alcaraz ha modificado su mecánica de saque para que sea más eficiente. Durante la última gira de tierra batida, el español comenzó a eliminar algunas de las paradas que realizaba al llevar la raqueta hacia atrás. Ahora, ha simplificado aún más su movimiento, evitando pausar el gesto en la parte baja para ganar fluidez y ritmo. Este cambio lo ayuda a buscar una mayor estabilidad al momento de ejecutar su servicio, algo esencial para no regalar puntos importantes en partidos determinantes.

El próximo 4 de enero, Alcaraz viajará hacia Australia con el objetivo de llegar al 100% al inicio de la temporada oficial. Además de las modificaciones técnicas, el jugador murciano ha aprovechado esta pretemporada para reforzar su preparación física, un factor clave para mantenerse competitivo en partidos largos y exigentes, como podrían ser los encuentros en el Melbourne Park.